Damask Metal Fest II: Viernes - Finntroll no consigue terminar su setlist con una sala a medio llenar (Barcelona - Noviembre 2019)

DAMASK METAL FEST II

SALA SALAMANDRA (Hospitalet de Llogregat, Barcelona)

15 de noviembre de 2019

Damask Events

El primer día de la Damask Metal Fest II, como dijimos en nuestra última previa, se centró en el lado más extremo, a caballo entre el black y el folk en tres de sus cuatro bandas, y un servidor estaba bastante entusiasmado por ver, especialmente, a Melechesh y a Primordial. Personalmente era «mi día», pues esos estilos son los que normalmente predominan en mis listas de reproducción.

Pero después de un tiempo de reflexión, me he ido preguntando qué es lo que pasó esa noche. Las sensaciones que tuve tanto al inicio de la primera banda como al salir no eran las que esperaba.

NIGHTRAGE

La banda de miembros suecos y griegos abría la velada con una sala dispersa, dormida, y muy vacía. Esto resulta habitual cuando hay otras tres bandas después, claro, pero creo que el público no valoró suficiente la energía con la que su vocalista Ronnie Nyman intentaba meternos en el concierto. «Nuestro trabajo es que calentéis motores para el resto de las bandas» dijo hacia mitad de su setlist. Podía sentir su frustración fácilmente al ver la falta de reacción. Saltó, corrió, cantó entre el público durante “Spiral”, hizo que nos acercáramos unos metros cuando parecía que ya había una buena cantidad de asistentes y al final, sólo al final, las primeras filas hicieron ruido durante los potentes versos de “The Tremor”.

En una gira normal, esta banda hubiera triunfado. Su melodic death es consistente, tienen buena variedad (mis favoritas, “Insidious” y “Affliction”, dan mucha caña), el vocalista interactúa mucho con el público… Hablando con asistentes y compañeros de profesión concordamos con que lo dieron todo en el escenario, que su energía debería haber bastado para mover al público. Los miembros estuvieron prácticamente el resto de la noche en el puesto de merchandising, hablando con el personal de la sala y con fans que compraron camiseta o disco. Actitud no les faltó.

Setlist:

Being Nothing
By Darkness Drawn
From Ashes Into Stone
Affliction
Wolf to Man
Embrace the Nightrage
Scathing
Insidious
The Venomous
Spiral
The Tremor

MELECHESH

Durante la pausa, la sala por fin pareció digna de recibir un festival. Aunque ni mucho menos era un lleno, había suficiente gente para empezar pogos y vigilar que las cervezas no se derramaran mientras te escurrías hacia las primeras filas.

Aunque la banda no es tremendamente conocida, en general, tuvo mucho más apoyo del público desde su segundo tema, “Tempest Temper Enlil Enraged”. Las vocales, rasgadas y muy agudas al más puro estilo black metal, y la distorsión tan bien refinada, convencieron mucho más. Yo, que soy buen seguidor de la banda, lo disfruté como un niño de principio a fin, pero se pudo ver que progresivamente el público perdía entusiasmo. Se notó mucho en “Multiple Truths” (mi favorita) y hasta prácticamente las dos canciones finales, cuando “Triangular Tattvic Fire” despertó el interés de la audiencia.

En general, su show fue menos interactivo, principalmente porque su vocalista, Ashmedi, trabaja también la guitarra. Cuesta transmitir lo mejor de uno mismo haciendo dos cosas a la vez. El público, esta vez, lo compensó con aplausos y vítores sinceros, y una buena cantidad de fans se pasaron a ver el poco merchandising que había de Melechesh en el puesto.

Setlist:

Ghouls of Nineveh
Tempest Temper Enlil Enraged
Ladders to Sumeria
Grand Gathas of Baal Sin
Deluge of Delusional Dreams
Multiple Truths
Defeating the Giants
Traingular Tattvic Fire
Rebirth of the Nemesis

PRIMORDIAL

Sin duda, Primordial fue la banda que recibió más atención. Yo esperaba que para ese momento la sala estuviera bien llena, pero había demasiados conciertos y otras limitaciones al alrededor de la Damask Metal Fest como para conseguir el lleno que esperaban (y que yo esperaría con semejante line-up).

La banda, liderada por Alan Averill (de nombre artístico Nemtheanga) salió al escenario rodeada ya de aplausos y vítores, que correspondieron abriendo con pasión con “Where Greater Men Have Fallen”. Su única forma vocal y su folk mezclado con black enseguida pusieron al público a su favor y era difícil no ver a gente bailando, por el los medios ritmos de canciones como “The Gathering Wilderness” o “The Mouth of Judas” (que dedicaron a Melechesh, curioso guiño, pues la banda tuvo problemas con las autoridades israelíes por sus líricas hasta el punto de tener que trasladarse a Holanda). Sin duda, las más aclamadas fueron las dos canciones finales, “As Rome Burns” y “Empire Falls”, también mis favoritas, de su gran aclamado disco To The Nameless Dead, imprescindible para entender la banda.

Yo, que nunca he sido un fan incondicional de su trabajo de estudio, quedé muy impresionado y contento a partes iguales con el directo de Primordial. Es de esas bandas que hay que ver en directo ya que impactan mucho más, en especial las vocales de Nemtheanga, que sobresalen.

Setlist:

Where Greater Men Have Fallen
Nail Their Tongues
The Gathering Wilderness
No Grave Deep Enough
The Mouth of Judas
To Hell or the Hangman
As Rome Burns
Empire Falls

FINNTROLL

Turno para el cabeza de cartel de todo el festival, los más que famosos Finntroll.

Antes de que empiece a hablar del directo en sí, quiero poneros en situación: Primordial y Melechesh habían tenido una hora para tocar; el festival en conjunto empezó ligeramente tarde (una desgraciada costumbre en Salamandra); después de tres bandas con mucho tiempo para lucirse, el público (yo incluido) estaba cansado, incluso los que iban con la cara pintada al estilo de la banda se sentaron un momento, allí en primera fila; y la banda empezaba algo más tarde de las diez y media de la noche. Esta es una combinación peligrosa incluso para un cabeza de cartel, y más siendo una banda tan cañera y afín a los pogos como Finntroll, y es una señal de que hay que jugar muy bien las cartas para conseguir el mejor público posible.

Y no se consigue con un setlist de nada menos que dieciocho canciones. De acuerdo, había muchas canciones cortas y rápidas, y mira que me gusta este estilo rápido, pero el público no tenía aguante para tanto, saltando un poco durante unas canciones e haciendo descansos muy visibles entre las menos conocidas. Eso pasó entre las dos primeras “Blodsvept” y “Solsagan”, hasta que llegó el siguiente peso pesado “Nattfödd”. Sí, hubo pogos y hubo muchos brazos levantados a lo largo y ancho de todo el directo (y, de hecho, fue la banda que más activó al público), pero conforme pasaban los temas el público menos entusiasmado se fue marchando. Tampoco ayudó que hacia mitad del setlist hubiera problemas de sonido con el bajo, que les retrasó aun más.

Pasadas las once y media, a la banda se le ocurrió tocar una canción bastante disonante de su setlist y muy poco conocida, “Grottans Barn”, casi una balada, comparada con el resto de canciones de su repertorio. Y se fueron a por el minidescanso antes de las canciones finales con una sala que iba a medio gas y con sólo dos tercios del público del que Primordial había gozado. Cuando volvieron tenían toda la intención de tocar sin parar las tremendamente similares y aclamadas “Jaktens tid”, “Trollhammaren” y la favorita de la mayoría, “Under Bergets Rot”. Era casi media noche ya, y no es habitual que los conciertos pasen de esa hora. Sorpresa de todos los fans cuando desde el lateral les dijeron a Finntroll que no podían tocar la última canción. Probablemente, la banda ya se había excedido de su tiempo durante el descanso. Los fans, además de cansados, salieron decepcionados.

Yo salí perplejo pero, conforme se iba asentando la cronología en mi cabeza mientras me iba a casa, llegué a la conclusión que un montón de pequeños problemas, aparentemente desconectados, convirtieron una velada a rebosar de gente en una sala medio vacía con un setlist sin terminar. Quizás, si les hubieran avisado antes de que iban cortos de tiempo, habrían decidido saltarse una canción o dos menos relevantes, o concentrar el setlist mejor. Pobres, los de Finntroll, fueron los que menos culpa tuvieron.

Setlist: