CRÓNICA: Los clásicos de inundan Leyendas del Rock con Schenker y Dirkschneider – Sábado 12 de Agosto

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LEYENDAS DEL ROCK

Sábado 12 de Agosto 2023

Villena, Alicante

Y llegó el principio del fin; Angus McSix inauguraba de forma épica la primera batalla del último día con Master of the Universe. Cuando de repente una espada clavada en una roca como parte de la escenografía cobró protagonismo por encima del resto, y es que era el turno de Sixcalibur.

No de otra manera podría acontecer como la lucha entre la fuerza del músculo y el alma para al final ser capaz de desprender la hoja de la roca y blandir la espada al aire. Lo que le convertía en el rey del Leyendas, mientras las masas aclamaban al héroe.

Pero la espada no fue la única protagonista, y es que también apareció un dinosaurio blandiendo un sable laser, o un unicornio mágico que surfeando las áridas tierras de Villena transportó a un esbirro a la cantina de la villa en busca de un trago de cebada con el que remojar el gaznate.

Un baño de masas se dio Angus mientras todo el mundo cantaba su nombre en temas como  Starlord of the Sixtus Stellar System y Just a Fool Will Play Tricks on Angus McSix para acabar conduciendo cuesta abajo y sin frenos directos al infierno con Ride to Hell.


Mientras tanto en el Mark Reale éramos muchos los que esperábamos a Dragonfly que con una trayectoria a sus espaldas de más de veinte años pisó fuerte el escenario del Leyendas para presentar ‘Domine XV’, la regrabación de su disco ‘Domine’.

A pesar de unos pequeños problemas iniciales con la guitarra de Víctor, el cual supo sobreponerse rápidamente, la banda no perdió la energía y brindaron un concierto cuidado y completo, repasando temas más clásico, como Ángeles de una sola ala de su segundo disco, El peso del mundo o la preciosa balada Regresa a mi, que nos dió unos minutos de calma para tomar aliento antes de Soy, en la que aprovecharon para dar las gracias a los presentes sobre los que ya se notaba el cansancio del último día.

Sin Isauro en los teclados, la banda gozó de un gran sonido y pudimos disfrutar de lo lindo de la maravillosa voz de Pablo y del remolino imparable que es Juanba sobre las tablas.


Corriendo de nuevo al escenario principal para ver a Avalanch que venían con novedades en sus filas y es que desde hace unos meses cuentan con José Pardial a la voz y Nando Campos al bajo. Sin embargo, y a pesar de ser una de las bandas que más me atraían de la jornada no quedé muy contenta, siendo sinceros.

Es cierto que José tiene una gran presencia y como frontman gana muchos puntos, sin embargo no estuvo muy afinado esa tarde. Tuvo el apoyo vocal de Manu Ramil, que aparte de ser un teclista excepcional tiene una voz preciosa, y Nando Campos.

Otro de los grandes titanes con los que cuenta la banda es Mike Terrana, del que poco queda por decir. Y claro, las seis cuerdas le pertenecen a Rionda que nos deja embelesados, da igual las veces que lo hayas visto en directo.

La banda presentaba su nuevo disco del cual pudimos escuchar Horizonte Eterno, pero lo dejaron un poco de lado, para regalarnos esos clásicos que siempre funcionan. Y así disfrutamos de Pies de barro, Mil motivos, Niño, Lucero, o los que ya se pueden considerar grandes himnos de la banda Xana y Torquemada.


Pedro Botero es una banda zaragozana de hard rock y heavy metal liderada por Rubén Bartolomé que es el encargado de la voz y una de las guitarras, quien se había atado un pañuelo en la frente que bien evitaría la caída de sudor que tanto provocaba el calor en estos días. Aunque cierto es que por suerte el sábado tuvimos un poco de tregua en cuanto a máximas se refiere.

El cuarteto lo complementan Nano Pérez al bajo, Cesarito Royo a la guitarra y Alejandro Duarte a la batería. Los cuales fueron capaces de convocar un buen número de asistente en el Mark Reale, donde pudimos escuchar temas como Me Falta el Aire.


Y a pesar de que el sábado estaba marcado por un cartel que tiraba más hacia los clásicos HÄMATOM irrumpía con una puesta en escena cargada de detalles visuales y se robó el corazón de muchos leyenderos. Se disculparon por la falta de Peter «West» Haag, cuya máscara colgaba del pie de micro de Timi, su sustituto.

Máscaras, pinturas, una bandera de arcoíris que escupía fuego, una silla eléctrica para Nord y un directo divertido, marcado por temas pegadizos con una mezcla de estilos muy variopinta que nos pusieron a todos a bailar fue lo que  nos ofrecieron los alemanes.

Es regnet Bier, Behind the Mask se mezclaban con versiones más excéntricas como Canción del mariachi o I Want It All.  Y por si todo esto no hubiera sido suficiente Rorsten «Nord» Schar, el cantante, bajaba al público para entregar rosas a las primeras filas y Frank «Süd» Jooss subido en una pequeña tarima en la que habían montado una batería fue arrastrado por el público del Leyendas en el último tema. 

Increíble. Me quedo con ganas de verlos en directo y disfrutarlos con un poco más de calma y atención.


Turno para la que se podría considerar una banda local, y es que Badana es un trío alicantino de rock & roll fundado en Ibi. Por lo que son vecinos de los villenenses, y durante esa semana también de los leyenderos que allí nos juntamos.

Una formación muy sencilla que cambió hace poco y actualmente acaban de cumplir un año juntos. Dicho trío está formado por Llupia a la batería, Rubén al bajo y Miguel Rico compartiendo voz y guitarra. Los cuales nos hicieron disfrutar con temas como Centinelas de la Noche o Animal una canción contra el machismo y los asesinos.


Tal y como anunciaban en el cartel, las canciones de White Lion sonarían en Villena de la mano de Mike Tramp, el cuál recientemente había publicado este mismo año un disco con los temas regrabados por completo.

Salieron a escena, con los instrumentos con un aspecto desgastado, como si de otra época los hubieran traído. Tiempo hubo para dedicárnos algunas palabras en español entre Mike que pasó una temporada viviendo en nuestro país, aunque le costaba un poco hablar el idioma; y su guitarrista Marcus, el cual no tenía ninguna dificultad ni siquiera algún tipo de acento al hablar, ya que como nos contó pasó su infancia entre nosotros. Por lo que todo ello hacía que este show fuera muy especial para ellos.

El concierto sonó de lujo, con una voz brillante de Mike y varios tramos de guitarreos más cañeros. Aunque también hubo tiempo para los tramos lentos, como con el tema con el que cerraron el show Broken Heart. Que empieza con una balada para poco a poco ir cogiendo mucha fuerza y garra.

Tras finalizar se llevaron de recuerdo los vítores, «oes» y ovaciones varias del público que no paró de disfrutar en todo momento del concierto.


Por otro lado los veteranos Virgin Steele, heavy metal proveniente de Long Island se presentaban el Mark Reale.

Lo cierto es que el recinto se llenó hasta la bandera y uno de los motivos es que son pocas las ocasiones de verles en directo, así que fue una suerte que confirmaran su presencia en esta edición del festival.

Otra de las atracciones de esta banda es sin duda David DeFeis que a pesar de los años, o igual gracias a ellos, se desenvuelve con una gran maestría y consigue aunar a ritmo de los grandes clásicos de la banda a todo bicho viviente que haya cerca.


Y de nuevo en Leyendas del Rock teniamos Hammerfall la banda liderada por la voz Joacim Cans, con Oscar Dronjak y Pontus Norgrena la guitarra, Fredrik Larsson al bajo, David Wallin a la batería.

Incombustibles e impasibles al paso de los años la banda se lanzaba de lleno con dos grandes temas como son Brotherhood y Any Means Necessary, power metal épico de la vieja escuela.

El público se rendía ante Renegade y la banda se crecía entre vitores y aplausos para seguir demostrando que son merecedores de la fama y la gloria con Venerate Me o Last Man Standing.

Con el extenso medley Hero’s Return / On the Edge of Honour / Riders of the Storm / Crimson Thunder la banda nos dejaba casi sin aliento, y aún así (We Make) Sweden Rock, la balada lleva después de Let the Hammer Fall y Glory to the Brave.

Me impresiona la precisión con la que la banda se desenvuelve en el escenario, con movimientos perfectamente coreografiados para darse paso unos a otros y cediéndose el protagonismo entre ellos, sabiendo aprovechar a las mil maravillas el espacio disponible.

La banda se despedía con Hearts on Fire, pero creo que no será la última vez que los veamos por Villena, así que después del disfrute nos toca volver a esperar.


Con casi 20 minutos de retraso sobre la hora prevista, iniciaba Shalom su concierto en el escenario Mark Reale con la canción que da nombre a la banda, seguida de Noches y No me Olvidarás.

Esta banda de Algeciras nos ofreció durante su concierto un glam rock mas tranquilo al resto del festival, donde mezclaron solos de guitarra con diversos tempos a lo largo del concierto. Ideal para coger fuerzas junto a sus melodías y afrontar así las últimas bandas de esta edición.


Michael Schenker Group arranco fuerte su concierto en el escenario Azucena. Tan fuerte que no pude evitar cantar mientras hacía las fotos en el tramo inicial con canciones como Doctor, Doctor. Así que esperemos que no salieran muy movidas.

Los que si se movieron y mucho fueron los tres maestros de las cuerdas, que no pararon de jugar y hacer coreografías juntos. Durante los cuales tuvieron diversos momentos en los que destacar por tal virtuosidad mientras las luces destelleaban a sus espaldas.

Rock Bottom contó con un largo solo de guitarra de Michael… enorme… largísimo… llegó un momento que creí que no iba a acabar nunca. Para al final cerrar con Too Hot to Handle en el que el público cantó más fuerte que los altavoces.

Pero cuando parecía que el concierto iba a acabar, Gary levantó un dedo para decirnos que iba a sonar una más y no irse sin tocar Only You Can Rock Me.


El hard rock de The New Roses no pasó desapercibido por Villena. Venían a presentarnos su trabajo Sweet Poison, publicado el pasado año, por lo que The Usual Suspects arrancaba acompañada por las voces de todos los presentes.

Un concierto con un toque fresco y cargado de energía a ritmo de It’s a long way, Gimme Your Love o la versión de Neil Young Rockin’ in the Free World.

En los tiempos que corren no se como de políticamente incorrecto es decir esto, pero creo que la temperatura en Villena aumentó unos cuantos grados cuando Timmy Rough acababa sin camiseta.


Udo Dirkschneider es un cantante de heavy metal alemán, famoso por ser miembro fundador de la legendaria banda Accept. Desde fines de los años 1980 desarrolla su propio proyecto U.D.O. Sin embargo este año llegaba al Leyendas con su proyecto Dirkschneider con un set list formado 100% por temas de Accept.

UDO no venía solo, para este proyecto cuenta con el bajista Peter Baltes antiguos miembro de Accept. Andrey Smirnov y Dee Dammers a las guitarras y su hijo Sven a la batería completaban la formación esa noche.

Starlight fue la primera en sonar llamando la atención de los más veteranos que iban congregando en el escenario para disfrutar del que era el concierto más esperado de la tarde. Living for Tonite, Midnight Mover
y Breaker, un clásico imprescindible, serían las siguientes en sonar.

A pesar de UDO se mantiene bastante estático, su banda ya se encarga de que el concierto sea dinámico y potente, aunque bien es cierto que después de tanto negarlo las canciones de Accept funcionan prácticamente solas.

Y para muestra un botón: Princess of the Dawn, Son of a Bitch, Screaming for a Love-Bite, Fast as a Shark o el himno Balls to the Wall no defraudaron a nadie.


Vuelta arriba para ver a Diamond Head, banda inglesa que iba a ser una de las últimas en tocar en el Mark Reale de este año.

Tras una intro muy épica las guitarras rompen a sonar bajo el techo del pabellón. Mucho humo y una elección del juego y variedad de luces rojas, verdes y celestes que no pararon de combinarse destacaron durante la actuación.


Para los amantes del metal nacional la del sábado iba a ser una noche muy especial, y es que si algo esperábamos desde hacía muchos (demasiados) años, era el regreso de Ramón Lage sobre los escenarios.

Así que fuimos muchos los afortunados que no quisimos perdernos la presentación de Delalma, los cuales además arrancaban el año con la publicación y del que pudiéramos considerar uno de los mejores disco de este año (al menos en mi top 3 seguro que está).

David saltaba al escenario para dar inicio a un concierto emotivo y brillante. Manu Seoane, hacía de las suyas con la guitarra, con ese aire canalla ochentero. Jesús al bajo nos deleitaba con esas voces guturales. La única pega es que a Ramil, que era su segundo asalto hoy, prácticamente no lo escuchamos.

Se juntaron las ganas y la emoción cuando Acto de fe, Renegar de ti y Mañana vuelve a oscurecer daban comienzo, un sentimiento que fue aumentando de intensidad con cada uno de los temas hasta la eclosión final, que llegaba con el escenario lleno de chispas y humo a ritmo de Cárcel de cristal.

Para El Mirlo la pantalla trasera proyectó el videoclip al tiempo que la banda la interpretaba y para sorpresa de muchos la banda nos regalaba una versión del tema Wicked Game.

Voy a repetirme, lo se, pero que bonito fue ver a Lage de nuevo derrochando voz por los cuatro costados y acompañado de una banda tan increíble.


La banda Savatar que homenajea con sus tributos a Savatage fueron los encargados de cerrar el escenario Mark Reale en esta edición a última hora de la jornada del sábado.

Tiñéndolo principalmente de rojo, posiblemente debido a encenderse la reserva de las últimas fuerzas que ya nos quedaban por gastar en el festival. Este quinteto holandés nos ofreció sus versiones de la banda casi homónima centrados en el periodo de 1983 a 1993.

En lo que fue el fin de fiesta del «escenario pequeño» que tanto ha dado que hablar en esta edición y del que tantas líneas hemos escrito. El cual ha contado con grandes grupos que esperamos volver a ver muy pronto.


Y por fin llegaba! Gigatron en el escenario principal del Leyendas del Rock, y como cierre! Vamos, ya lo decía Charly Glamour... Cuatro días esperando a que tocaran todos los teloneros que llevaban durante este festival!!

Durante esta edición hemos visto heavy de todas clases, más o menos épico, más o menos clásico, más o menos moderno, más o menos serio… pero la propuesta de Gigatron sí que es para tomarsela en serio, y es que los valencianos consiguieron que el último concierto, a las 3 de la mañana, después de cuatro días de festival, se convirtiera en toda una fiesta de despedida.

El barco de colegas daba comienzo a esta fiesta, junto a La tierra del rock y Macho cabrío en la cual hasta el mismo satán hizo acto de presencia.

Pogos, congas y más pogos y más congas en todos los temas, sin parar. Incluso en Queridodín la gente se sentó en el suelo y comenzó a remar, un deja vú del año anterior con Alestorm.

Apocalipsis molón y Viking Bugui llegaron para terminar con nosotros, y eso que aún quedaban unas cuantas… Catapulthrash, Alluminati I: El papiro de aluminio, Alluminati II: Galileo Galactus y Heavy hasta la muerte nos despedían un año más de un festival que se ha convertido en imprescindible para la redacción de Maxmetal.net.


Y no queríamos cerrar esta serie de crónicas sin dar la enhorabuena y las gracias a la organización de Leyendas del Rock, a Marcos y a Carlos y a toda la gente que no vemos y que está por detrás luchando por que el engranaje funcione año tras año.

A la gente de la seguridad del festival y de los fosos que nos permiten hacer nuestro trabajo con toda la tranquilidad de saber que velan por nosotros y que riegan al público en las horas de más calor.

A la gente de las barras y del merchan por su atención y su rapidez.

A los compañeros de prensa que siempre nos dejan mejor sabor de boca del festival después de tantas horas compartidas, tantas carreras y tanto polvo levantado.

A los compañeros de TNT por todo el impecable trabajo que hacen día tras día en la carpa de firmas.

Y sobre todo al público que apoya año tras año un festival que para nosotros ya es casa, donde sabemos que venga quien venga, vamos a disfrutar durante 4 días del mejor metal.

Por Irene Kilmister y Javier Paredes.

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