CRÓNICA: Jueves Santo de la mano de Synchronical y Daeria – Sala Hysteria (Madrid) – Abril 2022

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SYNCHRONICAL + DAËRIA

MADRID – 14 ABRIL 2012

SALA HYSTERIA

El pasado jueves 14 de abril la sala Hysteria de Madrid brindó una noche de puro metal. Ambas bandas, a pesar de ser un día festivo, lo dieron todo encima de las tablas, siendo recompensados el público, quienes entregaron todo su cariño a los músicos.

Los encargados de descorchar la botella serían Synchronical, banda que no conocía personalmente y que agradaron a mis oídos. Después de una intro instrumental, los riffs atronadores de Time se apoderaron de la sala. Jesús, a las voces, me recordó mucho a Bruce Dickinson en cuanto al timbre de voz, demostrando su habilidad en un amplio rango vocal.

Tras iniciar con el tema que abre su último disco, continuaron con No More Tears of Rage y Losing Memories. Esta última con un ambiente un poco más doom o dark, pero manteniendo en alto toda la caña que caracteriza a la banda. Me quito el sombrero ante Daniel y Al, vaya dos maestros de las seis cuerdas. Con False Smile y Torn Soul nos iban a introducir en un sonido algo más moderno, melódico, más estilo americano, siendo estas muy bien recibidas por los fieles asistentes, jugando con los tempos de esta última.

La sorpresa de la noche llegó con, la más coreada y cantada, versión de Halloweed By The Name, de los icónicos Iron Maiden. Fue todo un placer escucharla y disfrutarla, y es que si cerrabas los ojos pareciera que estuvieses viendo a los mismismos británicos. Suelo ser partidario de que las bandas toquen sus propios temas, pero he de decir que lo disfruté mucho.

Nos íbamos acercando al final por parte de Synchronical. Second Chance, tema que cierra el último disco de la banda, no tiene nada que envidiar a la versión de la dama de hierro. Si bien dista mucho en cuanto estilo, el ritmo y el frenetismo no dejaron que el ambiente decayese, siguiendo con este frenetismo con el tema Forevermore, quiero mostrar mi admiración en este punto hacia las partes rítmicas, Gonzo a la batería y Felipe al bajo. Insomnia sería la ideal para cerrar el concierto, salvo que nos sorprendieron con un tema que no necesita presentación como es Ace of Spades, de Motördead, dejando la sala caliente a más no poder.

Muy buena banda en directo, temas muy bien ejecutados, a pesar de los pequeños problemas de sonido del principio, como en cualquier concierto. Nos hicieron vibrar y, en mi caso, descubrir una banda nueva con muchísima caña que entregar.


Llegaba pues el turno de una de las bandas que más proyección, en mi opinión, tiene en el panorama nacional, Daeria.

A pesar de que Víctor, uno de los guitarristas, no pudo asistir porque estaba con el dichoso virus ya tan famoso, defendieron el repertorio a las mil maravillas. En este aspecto hay que reconocer el trabajo de Eimel, quien cubrió él solo las doce cuerdas de la banda.

La ideal para abrir no podría ser otra que Miedo, donde las características luces rojas de la banda, al ritmo de la atronadora batería de Joel, abrazaron a la sala con un ambiente de puro metal. Unos riffs desnudos nos meterían de lleno en El Ojo de Aughra, tema que recuerda a bandas como Slipknot en algunos momentos. Sin embargo, ahí está la inconfundible voz de Ángel demostrando virtuosismo y dándole su sello de identidad al tema. El cantante afina que da gusto y se mueve muy cómodo en todos los temas.

Seguirían presentando su último disco, Alter, con Bailarina y Horus, temas en los que se vislumbra la parte más melódica de la banda, y que fueron muy bien recibidos por los fans asistentes.

Era el momento de dar un repaso a su disco debut, Fénix, con Laberinto, en el que el vocalista estuvo soberbio, y Luz de Luna, tema algo más épico o power metalero quizá. Buen momento para volver a recordar el virtuosismo de Eimel, quien llevaba un concierto de diez, pero en este solo, literalmente, se salió.

Hielo y Siete Mares nos traerían de vuelta al ultimo redondo de la banda. Tengo la sensación de que este último trabajo es más rotundo que el primero, en cuanto a sonido, mucho más agresivo. Desde aquí mi reconocimiento a Óscar, quien me pareció un auténtico musicazo.

El broche final lo dieron con dos grandes señas de identidad de la banda, Fénix, personalmente mi favorita y la que más disfruté. Para cerrar, un auténtico temazo como Reina de Corazones, inspirada en Alicia en el País de las Maravillas. Coreada por toda la sala Hysteria y cerrando la noche de caña y puro metal de la mejor manera posible.

Daeria es sin duda una banda con muchísimo potencial, donde la melodiosa voz de Ángel contrasta y empasta a la perfección la contundencia de la música.

Una gran noche que dio inicio a las vacaciones de Semana Santa y que, en lo personal, me descubrió nueva música que he explotado en estos días.

Redacción: Andrés Aranguren
Fotografía: J.Paredes

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