DEXTER WARD – III
NO REMORSE RECORDS
8,3/10
El heavy metal de tintes épicos ha tenido desde hace décadas un punto caliente en Grecia, y si lo pensamos desde un punto de vista lógico es algo que entra dentro de lo normal. La historia que acompaña a este país y el background de mitología épica que existe detrás de su cultura son el caldo de cultivo perfecto para que aparezca esta forma de expresión musical de manera espontánea (algo similar sucede también en Italia).
En este contexto encontramos la banda que nos trae hoy aquí. Dexter Ward se formaron en 2009 a partir de dos ex miembros de Battleroar, el vocalista Mark Dexter y el guitarrista Manolis Karazeris. Teniendo en cuenta la trayectoria de Battleroar y el hecho de que Manolis es el principal organizador de uno de los festivales de heavy metal underground más importantes del mundo como es el Up The Hammers, nos podemos imaginar qué pie calzan: un heavy metal que bebe directamente del género tradicional, del metal épico y el power metal más añejo. La propia portada ya nos transmite una idea de por dónde van los tiros.
Una potente y decidida oleada de riffs abre el álbum en Return of the Blades, recordándonos inmediatamente a los Judas Priest más cañeros, y al miso tiempo introduciéndose de pleno en territorio épico como bien atestiguan los magníficos coros finales. En general el oyente tendrá la sensación de estar escuchando canciones hechas por y para la batalla, al más puro estilo Manowar, con un Mark Dexter atacando agresivos tonos vocales, pero de una forma muy correctamente modulada.
Diversas intros en diferentes canciones, tirando de guitarras sin distorsión, invocan la atmósfera habitual que acompaña fielmente al heavy metal épico. Entre ellas destacan la de Soldiers of light y The eyes of Merlin, bien sutiles y etéreas, pero ninguna alcanza el sentimiento y la magia de In the days of epic metal. Todo un homenaje al género, y más en concreto a bandas individuales como Manowar (no puedo evitar acordarme de Battle hymn al escuchar estas notas), Warlord o Manilla Road. Mark le pone especial énfasis emocional a este tema, y junto con las estremecedoras melodías de guitarra y el inolvidable estribillo cuajan el tema más completo del álbum.
Encontramos un disco repleto de detalles a nivel de guitarras, centrados principalmente alrededor de agradables y sólidas melodías, pero al mismo tiempo no cesaremos de mover la cabeza con la potencia de muchas de las canciones. El power metal más cañero nos ataca de pleno en Conan the barbarian (nada puede resultar más épico que una letra basada en este personaje), y nos rematan con tres electrizantes descargas de contundencia en The dragon of the mist, Reign of the white knight y Demonslayer. Una contundencia que no sería posible sin la excelentemente firme base rítmica que apoya al álbum en su integridad, sobre todo por parte del batería Stelios Darakis.
En resumidas cuentas, el quinteto griego se ha marcado un notable ejercicio de heavy épico/power metal, el cual será del agrado de los amantes del heavy metal de la vieja usanza y muy especialmente de los seguidores de Manowar (creo que su influencia en Dexter Ward está más que clara). La actual situación respecto a la pandemia de coronavirus ha impedido que presentaran su disco en España, pues la asociación madrileña Pounding Metal ya se había hecho con sus servicios de cara a la decimocuarta edición de su festival anual. Es una pena, pero habrá que esperar a tiempos mejores para poder escuchar las delicias de este nuevo disco en nuestro país.
Marc Paradell
