COBRA SPELL (IK)
Para mi era importante en esta última jornada (y a pesar del horario) ir a apoyar a Cobra Spell. Y es que pocas veces podemos disfrutar de una banda única y exclusivamente femenina, algo que a mi como mujer me hace sentir muy orgullosa. Las cosas están cambiando, y lo que viene va a arrasar como un tsunami.
Y así fue, Cobra Spell arrasaron por completo en el escenario. Estas 5 mujeres juntas desprenden una energía y un «power» sobre las tablas digo de las bandas más grandes.
Kris Vega a la voz hizo un trabajo descomunal, llegando a esos registros impresionantes y versátiles, Sonia Anubis a la guitarra también tuvo ocasiones de brillar con los solos, Hale Naphtha a la batería se encargaba de mantener las bases sólidas con un excelente trabajo a las baquetas, Noelle dos Anjos, hizo un trabajo fue impecable y nos deslumbró con esa sonrisa brillante y, por último, Roxana Herrera al bajo terminaba por completar la formación con su gran trabajo con las cuatro cuerdas.
Las chicas tienen claro cuál es su estilo, así que no se estuvieron en nada y nos dejaron un setlist bastante completo para el poco tiempo del que disfrutaron, donde pudimos disfrutar de temas como «The Devil Inside of me», «Satan is a Women», «Love Crime» o «Addicted to the Night», con las que consiguieron poco a poco sacar a la gente que se refugiaba en las sombras para acompañarlas y cabecear a ritmo de los arrolladores riffs.
Sin duda creo que no hay mejor manera de comenzar el final de un festival tan épico como estaba siendo este Rock Imperium.
LOVEBITES (IK)
La cosa iba de mujeres esta última tarde, y las siguientes en salir al escenario fueron las japonesas Lovebites. Sin embargo, al contrario que sus predecesoras las de Tokio no consiguieron conquistarnos.
Un heavy metal bastante común y corriente en el que si algo destacaba (y que rabia me da decir esto) era la indumentaria que traían. Lo cierto es que fue un show bastante light y en el que la voz de Asami sonó desafinada durante gran parte del concierto.
Faltaba garra en este grupo, aunque creo que se la llevó toda Midori Tatematsu (guitarra) que sí parecía estar entregada y disfrutando del calor cartaginés.
SPIDERGAWD (YS)
Desde su debut homónimo en 2014, nominado a un Grammy noruego, hasta la sofisticada experimentación presente en sus álbumes posteriores, el supergrupo Spidergawd, originario de Trondheim (Noruega), ha dejado una marca indeleble en el panorama del género. La formación actual incluye al vocalista y guitarrista Per Borten, el baterista Kenneth Kapstad, el saxofonista Rolf Martin Snustad, el bajista Hallvard Gaardløs y el guitarrista Brynjar Takle Ohr. Esta combinación de talentos resulta en una fusión de estilos que abarca desde el hard rock hasta el funk y el blues, con toques de stoner.
El concierto no fue fácilmente accesible para la audiencia, y sumergirse en su musicalidad a lo largo del espectáculo resultó desafiante. Sin embargo, hubo momentos en los que logré conectar y realmente lo disfruté. Punto en contra que el saxofón se escuchara tan poco; sería recomendable encontrar una forma de amplificarlo adecuadamente para que los asistentes puedan apreciar mejor sus graves. Spidergawd exhibe un valiente sentido de experimentación que rinde un indomable homenaje al espíritu del hard rock.
A lo largo de sus siete álbumes, la obra de la banda ha evolucionado notablemente, ofreciendo capítulos de una narrativa sonora de asombrosa complejidad, evidenciando una evolución en los sonidos y giros hacia otras influencias. Durante el concierto, tuvimos la oportunidad de escuchar varios temas de su último álbum, «Chapter VII», como “Afterburner”, “Sands of Time”, “The Tower” y “Your Heritage”. Queda pendiente disfrutar de su música en un entorno más íntimo, ya sea en casa o en una sala de conciertos.
HOLYCIDE (IK)
Mientras tanto nos subimos un rato al escenario de arriba porque no queríamos perdernos el thrash arrollador de Holycide, la banda formada por Dave Rotten, cantante de Avulsed en 2004.
Como llegamos con el show ya empezado lo que nos encontramos fue un amasijo de gente haciendo mosh, walls of death y dejándose los cuellos con los temas.
Venían presentando su nuevo trabajo Towards Idiocracy, el cual lanzaron hace apenas unas semanas y que sigue manteniendo esa esencia de puro tharsh metal crudo, sin muchas florituras, son riffs vertiginosos y una voz que te retumba en las entrañas.
GREEN LUNG (YS)
Siguiendo la línea de la música más experimental, los ingleses Green Lung tomaron el relevo, dispuestos a desplegar su característico stoner y doom. Sin embargo, su propuesta se vio deslucida por el horario de la actuación, ya que quizá las 5 de la tarde, bajo un sol implacable, no fue el momento más adecuado. Aunque la mayoría de los conciertos se realizaron durante el día, este horario particular afectó negativamente su presentación y el público se mostró bastante apático.
Las guitarras densas y el teclista, quien no cesó de interactuar con el público, desempeñaron un papel fundamental en la banda. Tom Templar, por su parte, destacó en las voces, interpretando cada tema con precisión.
A pesar de estas circunstancias adversas, no se puede negar que su propuesta está llena de interés, especialmente considerando su corto recorrido. Cuando el stoner está bien ejecutado, es un estilo sumamente atractivo, con una profundidad y solidez que resultan muy convincentes. El repertorio incluyó temas como «The Forest Church», «Woodland Rites», «Leaders of the Blind», «Mountain Throne», «One for Sorrow», «Let the Devil In» y «Graveyard Sun».
RIVERSIDE (YS)
Otro grupo que tenía en la mira eran los progresivos polacos Riverside. De ellos, solo había recibido elogios, lo que justificaba una escucha atenta. Sin duda, están encaminados a convertirse en una banda de culto y a liderar el podio del rock progresivo. Su álbum «Wasteland» (2018) fue uno de los más aclamados de la década pasada, a pesar de estar marcado por una profunda tristeza. La muerte repentina del guitarrista fundador en 2016 sumió a la banda en una nostalgia que quedó reflejada en ese disco. En su más reciente álbum, «ID.Entity» (2023), se puede percibir cierto optimismo, aunque esa aura nostálgica aún persiste.
«Addicted», del álbum «Love, Fear and the Time Machine» (2015), fue la elegida para abrir el concierto y me sorprendió que no interpretaran ningún tema de «Wasteland»… Es impresionante cómo Mariusz puede mantener un nivel tan alto tanto en las voces como al tocar líneas de bajo tan complejas y trabajadas, que son su toque diferencial.
Durante parte del concierto, también nos recordó que no hacen rock, que no alcanzan notas altas y, por supuesto, que no son Dream Theater. Aunque fue una broma bien recibida, creo que ya lo sabemos, ¿verdad?
Interpretaron hasta tres temas de su último trabajo, como «Big Tech Brother», «Landmine Blast» y el sencillo «Friend or Foe?», que cerró el concierto y parece destinado a convertirse en un favorito del repertorio. En mi opinión, el setlist no fue del todo acertado, ya que habría preferido algunas canciones más adecuadas para un festival de media tarde; algunos temas cortaron el flujo del concierto y hubo un exceso de teclados (aunque el tecladista dio lo mejor de sí).
El horario volvió a deslucir la actuación, ya que claramente las 6 de la tarde no es el momento ideal para sumergirse en el progresivo de Riverside. A menos que llegues muy predispuesto desde casa, es difícil disfrutarlo plenamente. En mi caso, presté toda la atención posible, pero no logré adentrarme por completo en su música. Queda pendiente verlos en una sala de conciertos.
WARLOCK (YS)
Tirando de nostalgia, Doro, la indiscutible reina del género, hizo honor al legado de Warlock con un torbellino de energía sobre el escenario. Con su proyecto actual, Doro nos transportó a los días dorados del metal de los 80, interpretando con maestría las composiciones icónicas de álbumes legendarios como ‘Triumph And Agony’ y ‘True As Steel’, auténticas joyas del metal alemán que perduran en el tiempo.
Año tras año, Doro continúa demostrando por qué sigue reinando en la escena, conservando su trono con una pasión y energía que no conocen límites. La actuación estuvo repleta de himnos inmortales como «I Rule the Ruins» de ‘Triumph and Agony’, «Burning the Witches», e incluso la archiversionada «Breaking the Law», que fue recibida con entusiasmo aunque personalmente sentí que sobraba un poco.
Acompañada por un equipo excepcional, con Johnny Dee en la batería, Bas Maas en la guitarra y Stefan Herkenhoff en el bajo, Doro demostró estar en una forma incomparable. Su entrega incansable y la habilidad de su banda aseguraron una noche memorable para todos los amantes del metal que llenaron el recinto y volvió a poner de manifiesto que: «cualquier tiempo pasado nos parece mejor».
YNGWIE MALMSTEEN (IK)
Lo cierto es que se le queda MUY grande el puesto de cabeza de cartel teniendo en el mismo días bandas tan legendarias como Warlock.
CARCASS (IK)
Aprovechando que la propuesta del escenario principal no era muy atrayente, el publico decidió animarse a subir una vez más las escaleras que los llevaban al escenario de arriba para disfrutar de Carcass que contó con la mayor afluencia de público (en el escenario «pequeño») de todo el festival.
Los británicos llegaban con una puesta en escena simple, tan solo un telón al fondo para aquellos que no sabían lo que venían a escuchar.
La prestigiosa banda encabezada por Jeff Walker comenzó su descarga con el clásico «Buried Dreams» justo antes de «Kelly’s Meat Emporium» perteneciente a su último trabajo de estudio ‘Torn Arteries’, del que también nos regalaron «Dance of Ixtab (Psychopomp & Circumstance March No. 1 in B)» o «Under the Scalpel Blade»
Sin embargo la banda lo tenía claro, sabía que los temas que más calarían entre el publico serían clásicos referentes del death metal melodico como «This Mortal Coil», «Heartwork», «Pyosisified (Rotten to the Gore)» o «Exhume to Consume», elegida para cerrar un concierto impecable.
THE DARKNESS (YS)
Indiscutiblemente The Darkness eran la actuación merecida para cerrar cuatro días de jornada de festival confluyendo en tal variedad de estilos. Particularmente para mí eran el gran aliciente de la noche para llegar con fuerzas a la última actuación del día. Hard y el Glam Rock moderno, la actitud de la banda y, en especial, de su líder Justin Hawkins les convierten en una de las actuaciones imprescindibles.
Les pudimos ver en el Leyendas del Rock en 2015 y después en 2022, sólo por haber estado en tierras cercanas, más de uno ya conocía la trayectoria de los anglosajones y muchos fueron los que no desistieron de ver a Justin Hawkins en acción.
En cierto momento, pensé que el éxito de Manneskin impulsaría aún más la carrera de The Darkness, pero parece que ese momento aún no ha llegado. La energía constante y el carisma de la banda sobre el escenario hacen que sea casi imposible apartar la mirada de ellos. Además, los agudos perfectos de Justin fueron interpretados con precisión y sin esfuerzo aparente e incluso le pudimos ver haciendo el pino.
Durante varios momentos de su actuación, interactuaron directamente con los fans en el público, estableciendo una conexión especial con ellos.
Setlist nada desdeñable, interpretaron su ‘Permission To Land’ casi íntegro con motivo de su 20 aniversario, y dieron buena cuenta de ello. «Love Is Only a Feeling», «Love on the Rocks With No Ice», «Stuck in a Rut» o la ya reconocible «I Believe in a Thing Called Love».
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