CRASHDÏET – RUSH
FRONTIERS
6.5 / 10
El pasado es un lastre demasiado para algunas bandas. Es lo que lo ocurre a estos suecos. A Crashdïet habría que otorgarle todo el crédito del mundo simplemente por seguir apostando por un estilo cada vez más caduco, y es que hoy en día, no son muchas bandas las que practican un rock con descarada esencia Sleaze; y siguen haciéndolo bien, pero lamentablemente su pasado les marca.
Por mucho que hagan, siempre se comparará con su explosivo y espectacular debut de 2005 «Rest in Sleaze», un disco que logró revitalizar la esencia ochentera del glam y el sleaze, con una banda sobrada de carisma, con temazos pegadizos que eran un bombazo en directo («Riot in Everyone», «Breakin the Chainz», «Needle in Your Eye»), y con una imagen abrumadura. Lamentablemente, todo aquel aura de éxito desapareció cuando su vocalista Dave Lepard se suicidó en 2006.
Desde entonces, la banda ha vagado un poco a la deriva, con constantes cambios de formación en la voz (Oliver Twisted, Simon Cruz y ahora Grabiel Keyes), y aunque han seguido fieles al estilo que les catapultó a la fama, ningún disco ha logrado la brillantez y efervescencia de su primer trabajo, por no hablar que no han logrado que el público se vuelva a enganchar a la banda, sin dudas esa ausencia de una formación estable les ha penalizado.
Este nuevo trabajo «Rust» lo podemos colocar dentro de esa deriva, después de 6 años de espera podía esperarse algo más que un simple continuísmo de autoafirmación, sin embargo no deja de ser un disco correcto, fiel con la esencia de la banda, pero que no destaca ni sorprende. Al menos nos deja verles como una banda viva con ganas de seguir.
Rock sleaze, festivo, divertido, pero no adictivo, eso sí, hacen que un sonido de hace de 40 años suene hoy en día con vigencia y sin desentonar. Lo más positivo, es que están de vuelta. Esperemos que les acompañe la estabilidad.
Juan José Díez
