Hay ciertas actuaciones en directo que por su duración y el número de participantes parecen más un mini festival. Así fue esta tarde-noche comandada por Stick To Your Guns y secundada por otras tres bandas, Bodysnatcher, Elwood Stray y No Cure que atacaron con un muestrario de lo más variado dentro del *core.
Salvo para Stick To Your Guns, suponía la primera vez de gira por España, con lo que se esmeraron en agradar y ganar una base de seguidores de cara al futuro.
NO CURE
Abrieron la noche No Cure, una banda de Alabama de filosofía Straight Edge con un estilo que toca palos del metalcore, hardcore incluso el deathcore. Tuvieron que pelear contra la escasa afluencia debido a lo tempranero de su actuación, aún así fue tiempo más que suficiente para enseñar sus armas.
En estos estilos, la contundencia se presupone, de ahí que sea muy importante aportar un granito extra ante tanta potencia, y esa fue la pega de su actuación, muy cañera, sí, pero bastante monótona y lineal, aún así, al público le sirvió par ir entrando en calor.
ELWOOD STRAY
Mucho más melódica y poseedora de más musicalidad fue la propuesta de los alemanes Elwood Stray, que con un metalcore más canónico convenció a una audiencia que iba aumentando.
Esa típica combinación entre guturales y voces melódicas siempre funciona muy bien, al igual los cambios de ritmo de los que están impregnados los temas de Elwood Stray, ideales para que el público botara y saltara, aunque aún se mostrase un poco tímido de cara a atreverse con el crowdsurfing que pidió en más de una ocasión su vocalista.
Cantante que además de bordar la voz, contagió con su simpatía, locuacidad y energía. Sus saltos acompañaron los guitarrazos de su último disco «Gone With The Flow» («Negative», «No Cure», «Playing Along», «Uncertain Me»). También hubo tiempo de repasar temas más viejos como «Evolve», «Free Falling» o «Tresspass». Buen show que logró su objetivo, dar a conocer a una banda que sin duda dará que hablar en el futuro.
BODYSNATCHER
Podríamos decir que el desarrollo de la noche era una de cal y otra de arena, y es que ya a priori, el estilo de Bodysnatcher puede considerarse menos atractivo en cuanto a los elementos melódicos se refiere, lo suyo es un deathcore visceral, lleno de fuerza, potencia, ultracontundencia y velocidad, pero si no estás muy metido en el rollo, se puede hacer bola.
Esa fue mi sensación, aunque hay que reconocer que el público se volvió loco inundando la sala Mon de pogos, circlepits y demás elementos característicos, muestra fehaciente que conectaron con una audiencia entregada.
Sonaron cortes como «Behid The Crowd», «Infested», «Take me To Hell», «Ego Killer», «Say Goodbye» o «King of the rats», cortados por una sobreabundancia de contundencia pero faltos de melodías o elementos más vistosos musicalmente. Lo dicho, cuestión de gustos.
STICK TO YOUR GUNS
Increíble la conexión que puede mostrar el público con sus bandas. Fue sonar el primer acorde de «Against Them All» y desatarse la tormenta perfecta, entrando la sala Mon al completo en una vorágine de pogos, crowdsurfing, circlepits desaforados, inundándose el escenario de espontáneos que se lanzaban sobre una masa enfervorecida que disfrutaba de cada tema.
A dicha energía sin duda contribuyó una entrega total de la banda, y una prueba fehaciente de ello fueron los chorros de sudor visibles en la ropa de su vocalista Jesse Barnett, un frontman de altura que supo como dirigir con maestría el show entre semejante marejada.
Buen sonido, temas rápidos y directos que caían sin solución de continuidad, y el público disfrutando y derrochando adrenalina, ¿que más se puede pedir? Muchas veces en un directo es más importante lo que se siente que lo que se escucha, y en ese sentido Stick To Your Guns comprendieron a la perfección las necesidades de la audiencia, ofreciéndoles el mecanismo perfecto para desatarse.
El único momento de calma fue cuando Jesse agradeció al púbico su presencia y donde comentó que tuvieron dudas de emprender la gira debidos a los incendios en California -recordemos que la banda es de Orange County-, pero que viendo semejante respuesta, el esfuerzo mereció la pena.
Sonaron temas como «Severed Forever», «Such Pain», «More That a Witness», «Amber», «We Still Believe», «Invisible Rain», «Nothing You Can Do To Me», «What Goes Around», «Keep Planting Flowers», «We All Die Anyway», «Spinless», «Married to the Noise» y «Nobody», balazos sonoros llenos de garra y que que a muchos les pareció poco, y es que pese al buen puñado de canciones que sonaron, la duración total rondó la hora, ¿corto? sí, pero imposible ser más intenso.
S.A Sánchez
Fotos: Juan José Díez