SABATON – Carolus Rex Platinum Edition
NUCLEAR BLAST
9/10
El año 2012 fue para Sabaton un punto de inflexión. Sacaban al mercado el que era su sexto trabajo, Carolus Rex, y ya nada volvería a ser igual. Ni el grupo, ni su estatus ni nada. Los suecos daban el campanazo y en lo personal me demostraron que iban más allá de sacar unos buenos temas por disco; con Carlos Rexfueron capaces de sacar un disco completo y enamorarte. Era una obra conceptual y luego Joakimy Pär invitarían a salir del grupo a sus cuatro compañeros tras el éxito de esta obra, casi nada… La ambición del grupo llegó a sacar el disco en la versión sueca y la inglesa. Funcionó, hasta el punto de llegar al número 2 en las listas suecas y a ser ya cadruple platino, también oro en Polonia. La temática no fue otra que el auge y caída del imperio sueco basándose en la figura de Charles XII.
El disco que confirmó a Sabaton y que fue cuádruple platino
La producción estuvo a cargo de Peter Tätgren en los Abyss Studios, toda una garantía de calidad técnica. La cantidad de himnos imperecederos que acompañan al grupo desde entonces es ingente, hasta el punto de que es su segundo disco con más presencia en sus sets de directo tras The Art of War. “Carlous Rex”, “Gott Mit Uns” (con ese deje folk que pasará a ser una de sus señas de identidad a partir de entonces) y “The Lion from the North”, son los cortes que se llevan la palma. Siguen una fórmula ganadora siendo unas más hímnicas y otras más rápidas. Ampulosidad, emoción, pero siempre buscando el efecto directo y con el toque importante de los teclados. En su día llegué a escribir que “Poltava” buscaba inspiración en Savatage. Hoy no iría tan allá… pero sí que se han acercado a los de Tampa más de una vez.
Muchos de sus mayores himnos están en Carolus Rex, su primer disco conceptual
El medio tiempo “A Lifetime of War” sigue siendo una de las composiciones que más admiro de toda su carrera, con ese tratamiento de semibalada. “1648” retoma la velocidad con un estribillo marca de la casa y un solo doblado, aunque peca de ser típica. Pero la gracia de todo el disco es que todos los temas tienen algo por lo que merecen ser recordados. Tema por tema estamos delante de un trabajo muy redondo. Ejemplo de ello es “The Carolean’s Prayer” con un gran riff de guitarra y teclado y otro estribillo de puño en alto. “Killing Ground” y “Long Live the King” funcionan perfectamente y no suenan a relleno. “Ruina Imperii” es quizá el tema menos interesante de toda la obra, con dejes arabescos y voces distorsionadas, pero al fin y al cabo se salían un poco de la fórmula mágica.
El regalo son las versiones de Amon Amarth, Rammstein y Status Quo
La gracia de esta edición platino son los cuatro temas añadidos y que sustituyen a esas innecesarias versiones instrumentales de algunos temas que ofrecieron en su día. Por un lado, está la versión popularizada por Status Quo del “In the Army Now”. Potente y divertida. Pero la más sorprendente es el “Feuer Frei” de Rammstein. Impresionante que fueran capaces de meterse en ese jardín y salieran airosos de ese gran single del Mutter. El “Twilight of the Thundergod” de Amon Amarth se lo apropian y les sale exquisito. Curiosamente queda demostrado que ambas bandas no están tan lejos de una fórmula ganadora bastante cercana. La restante es “Harley from Hell”, un tema que se metió en un recopilatorio de la revista Metal Hammer y que suena horrores a Rainbow, especialmente por el riff. Está curiosa y hará las delicias de fans completistas.
Llegué a puntuar el disco en su día con un 8,7, hoy le otorgo un 9. Suele pasar que con el tiempo uno cambia un poco la opinión, pero no sería este el caso. Personalmente es el disco de Sabaton al que le tengo más cariño y es para mi el más representativo junto con el Coat of Arms. Carolus Rex supuso un paso hacia adelante y el confirmar lo que muchos apuntamos en su día: que con Sabaton podía haber relevo. Un placer poder volver a disfrutar de esta obra como si estuviéramos en 2012, y más con esos cuatro temas de regalo.