El último día del festival venía precedido de la mala noticia de la cancelación del concierto del cabeza de cartel Korn. Un día antes se había reprogramado su actuación para primeras horas del día para salvar unos problemas con el aeropuerto, pero finalmente una avería en su avión les privó de tocar en Viveiro, un auténtico jarro de agua fría para muchos de sus fans y sobre todo para aquellos que sólo habían comprado la entrada del domingo.
Dicha ausencia obligó a una reprogamación total de los horarios, adelantándose la mayoría de ellos, algo que sobre todo agradecieron los que trabajaban a la mañana siguiente.
ELECTRIC CALLBOY
Tras los cambios, nuestro primer concierto del día fue el de Electric Callboy, posiblemente la actuación más divertida del festival. Las ganas de cahondeo podían palparse desde mucho antes, con multitud del público disfrazados con ropa de gimnasia ochentera.
Mucho colorido que aplaudió una banda entregada. Comentaron que les había costado bastante llegar hasta Viveiro, pero que visto lo visto, había merecido la pena… también hicieron algún chascarrillo con los alemanes de Mallorca, donde también mostraron su disgusto por la imagen que suelen dar de los alemanes.
Comenzar un concierto con «Pump it» también es toda una declaración de intenciones, aquí se viene a botar y pasarlo bien desde el minuto uno, y eso fue el concierto de Electric Callboy. Risas, buen rollo, y de nuevo, multitud de crowdsurfing. Tras este tema inicial, cambio de indumentaria para atacar «My own summer», «Hate/Love», «The Scene», «Castrop X Spandau» y «MC Thunder II».
Todo seguía marcado por un ambiente puramente festivo, así llegaron «Best Day» y un «Hypa Hypa» (con nuevo cambio de vestuario) de lo más divertido. Para el final, «Crystal», «Spaceman», «Mc Thunder» y un apoteósico «We Got The Moves».
En este concierto habría sido algo secundario, pero el sonido volvió a estar a gran altura.
BLOODHUNTER
Segundo concierto de Bloodhunter que vemos en poco tiempo tras su descarga en el Z! Live. Lo mismo que dijimos entonces podíamos aplicarlo ahora, buena actuación llena de carácter e intensidad, con una diva atacando sin piedad con su contundente voz, aunque si tenemos que buscar un pero, en algún momento pecaba de cierta monotonía en los tonos.
Buen trabajo de las guitarras, y mucha caña. Coincidió su actuación con Frutería Toñi, de la que el público habla maravillas pero no pudimos ver.
STICK TO YOUR GUNS
La banda llegó como sustituta de última hora de Rise of The Northstar; agradecieron que una banda como ellos pudiera tocar en el escenario principal, y ofrecieron una actuación llena de garra, un ataque constante de principio a fin, con una banda muy dinámica a excepción de su guitarrista que llevaba un collarín.
Lamentablemente con ellos comenzó una lluvia que ya no pararía el resto del día, eso hizo que mucha gente buscara refugio, pero pese a todo contaron con un público abundante que disfrutó de temas como «Nobody», «Weapon», «Doomed by you», «We Still Believe», «Married to the noise», «Amber», «such pain» o «Against Them All».
Pura energía pasada por agua.
INFECTED RAIN
Otro concierto pasado por agua, que incidió negativamente en la cantidad de público, pese a ello la banda lo dio todo sobre el escenario, destacando tanto por presencia escénica como por fuerza vocal Lena Scissorhands, aquí tenemos una frontwoman de altura.
Competía con Lena en cuanto a magnetismo su guitarrista Vadim «Vidick» Ozhog, cuyas rastas a ritmo de headbanging eran otro gran espectáculo. Metalcore de calidad con buen sonido, entrega incondicional y buenos temas como «Pendulum», «Black Gold», «Fighter», «Orphan Soul», «Fool de Gravity» o «Sweet, Sweet Lies».
Lástima de la lluvia, a todos nos molestó un poco, logrando vencer nuestra resistencia y hacernos buscar cobijo para no acabar completamente empapados.
HEAVEN SHALL BURN
Hasta la fecha, mi particular podium de conciertos enérgicos estaba encabezado por Heaven Shall Burn. Cualquiera que les haya visto alguna vez en directo, sabe que es una banda que no especula y que encadenan descargas de adernalina sin apenas descanso. Su concierto del Resurrection Fest estuvo cortado por el mismo patrón, caña, garra, e incitaciones al público para vibrar y gozar con moshpits, crowdsurfing y demás, hasta dijeron que querían lograr un circle pit más grande del que tuvieron sus colegas de Caliban.
Gran comienzo con «Hunter Will Be Hunted», conde todavía algún problemilla con el sonido, sobre todo en la voz, cosa que se solucionó en los siguientes temas, «Black Tears» y «übermach». Marcus Bischoff se ha dejado el pelo largo, lo que no cambia es su sempiterna camisa roja, camisa que por cierto acabó empapada pero no por la lluvia, si no por el sudor ante tal descarga de energía.
También se dirigieron al público sus guitarristas, Mark Weichert y Alexander Dietz… siempre con una sonrisa en la cara, y reclamando más participación del público.
Sonaron otros temas, siempre cañeros, como «Voice of voicelss», «Corium» o «My Heart and the ocean», pero sin duda el que se llevó el premio al más cañero fue el final y apoteósico «Endzeit».
No defraudaron a nadie, nos dieron nuestra dosis de caña en un ambiente más épico gracias a la lluvia.
ANGELUS APATRIDA
Otros que no suelen defraudar son Angelus Apatrida, banda que tiene la virtud de hacer sonar moderno un estilo super clásico, y es que su Thrash suena super actual. Inicialmente no sonaron muy bien, pero poco a poco se fue entonando el sonido, y entre las somras y luces rojas vimos a una banda entregada que atacaron con temas como «Bleed The Crown», «Indoctrinate», «One of Us», «Vomitive» o «Of men and tyrants»
Pidieron al público emular algo que en su día hizo Frank Carter, un circlepit que rodeara la mesa de sonida, algo que secundó masivamente una audiencia entrega que parecía importarle poco la pertinaz lluvia que ya estaba minándonos la moral a muchos. Pedían más participación del público, pidiendo que los que estaban esperando por Bring Me The Horizon se acercara a su escenario, con pullita de cartelitos incluida.
«Childhood’s End», «Violent dawn», «We Stand Alone, «Gime Em War» fueron las siguientes en sonar, y aquí llegó la polémica del festival, ya que les bajaron el sonido para finalmente cortárselo en su última canción «You Are Next». Hay comunicado de la banda, y contra comunicado de la organización, Ya contamos nuestra opinión al respecto, pero sea como fuera, nada debe empañar la buena actuación de una banda sublime.
BRING ME THE HORIZON
Esta banda es un poco bipolar, lo es en su música con temas ultra cañeros que hacen palidecer al más heavy, y con temas super ñoños que aburren al más muermo, también lo es en su relación con el público, alternando simpatía por doquier, y borderías innecesarias. ¿que versión tuvimos? una mezcla respecto a la musical, y pura simpatía en cuanto actitud.
Gran escenario, buen juego de luces, con varias alturas en las que se distribuía una banda que sonó a las mil maravillas, y con un Oli Skyes de lo más comunicativo y juguetón, y mucha electrónica para hacer de su música un arma más festiva y bailable.
Comienzo por todo la alto con «Can You Feel My heart» y «Happy Song» y «Teardrops». Continuación con «Ludens», «Medicine», «Dear Diary» y «Parasite Eve» (con presencia de bailarinas) y un magistral «Shadow Moses».
Con un tipo con tanto magenismo como Oli Skyes, el resto de la banda suele pasar algo desapercibida, algo que se magnificó al quedar el resto de la banda siempre un poco entre penumbras, mientras que a Oli le seguí siempre un gran foco. Pero lo importante es que sonaron muy bien, y temas como «Kingslayer», «DiE4u» , «Mantra» o «Drown» brillaron, algo que no puede decirse de un acústico «Follow you» que supuso un ligero bajón.
Menos mal que lo solucionó con un final in-crescendo con «Obey» y «Throne», todo para firmar una actuación 10 minutos más corta de lo que se esperaba, pero bastante convincente.
Y así, empapados pero felices, acabó este Resurrection Fest 2022, un festival donde la organización ha tenido que trabajar duro para solventar muchos de los problemas sobrevenidos con cancelaciones y distintos problemas logísticas, pero que en líneas generales podemos tachar de muy positivo. Nos vemos en 2023.
Texto: Juan José Díez y S.A. Sánchez
Fotos: Juan José Díez