THE GHOST INSIDE + GIDEON + BOUNDARIES
MADRID – 6 NOVIEMBRE 2024
LA RIVIERA
ORGANIZA: RESURRECTION FEST
Es curioso los contrastes generacionales que se pueden observar en los distintos estilos de metal así como la fidelidad demostrada por los seguidores de uno u otro estilo en los últimos conciertos celebrados en La Riviera. Mientras bandas veteranas que rezuman clasicismo como Accept abarrotaron La Riviera, otras que serían su lógica evolución en el tiempo como Kamelot se quedaron a medias, y finalmente, este concierto de tres bandas con estilo mucho más contemporáneo, moderno y proclive para gustar a un público más joven presentó la entrada más pobre de los tres.
Pero como decía Ruben Darío, juventud divino tesoro, a falta de una multitud, buenas son las ganas, la entrega y la pasión demostrada por una audiencia efervescente que entregó con ganas a las desiguales descargas de Boundaries, Gideon y The Ghost Inside.
BOUNDARIES
La música de Boundaries transita en esa difusa frontera entre el metalcore y el hardcore, pero cuando la balanza se decanta más hacía el último, olvidándose un poco del dinamismo en pos de ganar una mayor contundencia, acaba por sonar pesado y monótono, y justo eso fue lo que ocurrió en su concierto.
Sobrado de caña y energía, le faltó un algo distinto para no caer en la monotonía y en esa sensación de estar escuchando un tema sin fin. Transmiten mucha energía, sí, se bota, se vibra y se siente, pero a veces resulta complicado conectar con la música, echándose en falta algún brote más verde y distintivo.
Buen sonido, no muy alto, acorde con el escaso público de una tempranera actuación, irreprochable en cuanto al desempeño técnico y entrega.
GIDEON
La disonancia entre lo que ves y lo que escuchas es lo primero que llega en un concierto de Gideon. Su música, brutal, hiper contundente y explosiva, contrasta con la indumentaria más country de su vocalista, donde ese sombrero y botas tejanas son curioso destinatario de las primeras miradas del público ajeno a la banda.
Y es que como ocurría con Boundaries, también tienen un metalcore más rocoso y visceral, exento de elementos más melódicos o vistosos musicalmente, es una banda que ha cedido todo el protagonismo a la potencia de sus temas; en ese aspecto no está mal, hace botar, la gente responde con pogos, headbanging masivo y hasta intentos de walls of death, pero no puedo por menos que acordarme de aquel anuncio de Pirelli -sí, soy viejo- de que «la potencia sin control, no sirve da nada».
Aunque menos monótona que su predecesor, su innegable herencia hardcore a veces también deriva en un muro de contundencia difícil de digerir si eres ajeno a esta música.
Mucho moviemiento sobre el escenario, más calor en un público que poco a poco iba creciendo, y un sonido decente para que temas como «Bite Down», «Push It Back», «Locked out of heaven», «Take of», «Sleep», «Cursed» o «No love/No one» sonaran con toda su potencia.
No estuvo mal, pero lo dicho, muy árido para los nos fans.
THE GHOST INSIDE
El de Madrid, último concierto de una extensa gira europea, llegó justo después del sobresalto del día previo donde la banda anunciaba que cancelaba el resto de conciertos de EEUU para cuidar su salud física y metal tras los extenuantes conciertos del viejo continente.
Llegaron con la batería justa, pero hay que reconocer que no se les notó, sacaron fuerzas de flaqueza y se dejaron todo para cerrar con dignidad esta gira que según sus propias palabras, les ha agotado. Teniendo en cuenta su accidentado pasado -un fuerte accidente de tráfico que desembocó en importantes lesiones- este agotamiento y problemas no son cosas a tomarse a la ligera, mejor que descansen, recarguen pilas y vuelvan con la fuerza y ganas que su música merece.
La excusa de la gira era su último -y más que notable- trabajo «Searching for Solace», y de hecho, fue el disco con más temas en el repertorio, aunque dejaron espacio para mirar al pasado y recuperar temas más antiguos, destacando otros 5 cortes de «Dear youth» y luego cortes sueltos donde destacó el antiquísimo «Betweens the lines» del Returners.
Es más que palpable la evolución del sonido de la banda a lo largo de estos años, su metalcore se ha ido adaptando al paso de los tiempos, volviéndose más accesible y melódico, y bajo mi humilde opinión, sonaron mucho mejor temas como «Death Grip», «Earnt It», «Light Years», «Split» o «Wash It Away» que otros míticos como «Engine 45» o el aclamado «Faith or forgiveness», y es que la variablidad de las nuevas composiciones, el contraste entre las distintas voces, o los cambios de ritmo suenan mucho más efectistas que la abrumadora contundencia del pasado.
Tuvieron el mejor sonido de la noche, de largo, demostraron todas sus virtudes y gritaron a los cuatro vientos que el presente y futuro de la banda -pese al cansancio acumulado- puede ser igual de brillante que el pasado.
Juan José Díez