ROTTING CHRIST + BORKNAGAR + SETH
MADRID – 19 OCTUBRE 2024
SALA CHANGÓ
ORGANIZA: MADNESS LIVE
¿Tiene diferentes tonos la oscuridad en la música? Nada mejor que asistir a conciertos como éste para constatar como dentro del metal oscuro pueden encontrarse distintos matices, desde el black metal más canónico de los pioneros franceses Seth, al black de tinte más experimental y progresivo de Borknagar, o del black tamizado de tintes góticos e influencias más death de los titanes griegos Rotting Christ, tres propuestas diferentes ante las que el público madrileño respondió con ganas abarrotando la sala Changó.
SETH
Buen show de los franceses Seth, sus escasos 40 minutos supieron a poco, pero fue tiempo más que suficiente para que convencieran con un black intenso, teatral y contundente, tal y como demostraron con el comienzo con «Insurrection»; en un correcto castellano comentaron que en Francia «Black metal» se dice «Metal Noir» -segundo tema de la noche-, y de ahí, paso a «La monsure du Christ», «Et que vive le diable» y como cierre «Hymne au vampire, acte!».
Buen sonido y puesta escénica efectista donde destacó un Saint Vincent que aderezado con su túnica puso ese toque teatral adicional.
BORKNAGAR
Borknagar es una de esas bandas para disfrutar con calma, su música llena de matices e influencias siempre muestra una cara distinta en cada escucha, pero pese a esa complejidad, en directo también muestra un tono muy disfrutable. Sin duda ayuda que la banda esté compuesta por unos músicos sobresalientes hasta el punto que muchos consideran a Borknagar una de estas bandas «all-stars».
ICS Vortex al bajo y la voz, Lazare al teclado y también a la voz, Bjorn Dugstan a la batería, y Oystein G Brun y Jostin Thomassen a la guitarras mostraron una gran compenetración, alternándose las voces, y clavando cada instrumento, inundando la sala Changó con su tsunami de musicalidad y heterodoxia.
«Nordic Anthem», «The Fire That Burns» y «The Rhymes of the Mountain» fueron las primeras en sonar, seguidas de uno de los que siempre he considerado uno de sus mejores temas, un «Up North» que sonó magistral y que demuestra las múltiples virtudes de una banda super engrasada y rebosante de talento.
Lo bueno de un concierto de Borknagar es que cada tema es super diferente al anterior, de esta forma no hay posibilidad de estancamiento, linealidad o aburrimiento, «Voices», «Colossus» o «Moon» ofrecen ingredientes muy diferentes pero que cocinan un menú de black progresivo delicioso. Para que todo fluya es necesario contar con un buen sonido, y afortunadamente todo sonó pulcro, pudiéndose disfrutar de todos los instrumentos y de toda la musicalidad que construyen estos noruegos.
Siempre he sentido una debilidad especial por Baar Koslstad, -fuera de la banda desde 2018-, pero ahí quedan sus composiciones a la batería en un relevo perfectamente ejecutado por BJorn.
Como final de esta lección magistral de directo, «Summits», «Dauden» y «Winer Thrice». Sobresalientes.
ROTTING CHRIST
Que delicia el concierto de Rotting Christ. No sólo por la música ejecutada, magistral, brillante, pulcra y sin fisuras, si no por el ambiente generado en el mismo, una especie de comunión masiva donde un Sakis Tolis ejerció como perfecto sumo sacerdote.
Su música, de marcado corte satánico, está llena de melodía y brillantez, donde destacan unos riffs super llamativos ante los que es difícil resistirse, los temas son un ataque constante de incentivos, y si además están acompañadas de buen sonido, como fue el caso, tienes todo para construir un conciertazo de esos que se recuerdan con una sonrisa.
Cierto es que Sakis se lleva la mayoría del protagonismo, y que su conexión con el público es genuina y natural, pero hay que destacar la gran labor de Kostis Foukarakis a la guitarra, haciendo que todos los temas brillaran de la misma forma que lo hacen en los discos. También bien Hiliotis al bajo, transmitiendo mucha intensidad y buen rollo.
Tras un comienzo sosegado con «Aealo» y «Pretty World, Pretty Dies», «emonon Vrosis» desató toda la explosividad en el público, mutando éste en un masivo pogo que aportó más intensidad a un concierto que ganaba potencia poco a poco. Así fueron cayendo cortes como «Kata Ton Daimona Eaytoy», un magistral «Like Father, Like Son» de su último disco «Pro Xristoy«, «Elthe Kyrie», «The Sign of Evil Existence» o un «Non SErviam» que maximizó esa sensación de sacramento masivo.
Oscuridad a cargo de «Societas Stanas», y rápido y contundente camino al final de la mano de «Grandis Spiriturs Diavolos» y «The Raven», y «Noctis Era» en los bises como guinda final.
Normal que sea una banda de culto. Maravilla de actuación.
Juan José Díez