LEYENDAS DEL ROCK
Jueves 10 de Agosto de 2023
Villena, Alicante
Llegaba el segundo día de Leyendas, aunque este año sin acústicos ni camping stage y con un horario un poco más de merienda que en ediciones anteriore, algo que con la que estaba cayendo, yo agradecí. Esta vez con Burning Witches para darnos la bienvenida al recinto.
Seguro que aparte de las brujas más de uno salió ardiendo en la jornada del jueves, que prometía ser la más calurosa, con temperaturas de hasta 45°.
Enérgicas y con una gran interacción con el público, Burning Witches llegaban directas a hacernos disfrutar y aunque el repertorio fue cortito Unleash the Beast, World on Fire y The Dark Tower salieron en representación de su último disco, cuya portada vestía el escenario.
La banda The Dark Side of the Moon con Melissa Bonny a la cabeza eran los encargados de estrenar el escenario Mark Reale en esta edición del Leyendas. Una cita musical ineludible para todos los friki-fans de series y películas de culto.
Ya que versiones como Lumos! El tema sobre Hedwig’s, la lechuza de Harry Potter o la canción de la serie Vikings nos endulzaron los oídos junto a esa maravilla de voz y la variedad musical que da contar con un arpa entre tus filas. Lo cual también añade un toque diferenciador de la mayoría de grupos. A lo que además hay que sumar que invitaron a tocar el violín a Johanna de Feuerschwanz.
Melissa combina y cambia de melódico a gutural tan fácil y rápido que parece por arte de magia. Dice sentirse encantada por poder estar actuando en el festival por segundo día consecutivo y muy agradecida por el recibimiento del público que de por sí ya está a tope con ella y con la banda.
A pesar de los 45 grados que azotaban Villena Beast in Black saltaban al escenario con su uniforme reglamentario de gabardinas y cueros para hacernos vibrar.
Tras abrir con Blade Runner, de su último disco, y con una puesta en escena coreografiada que los hacía moverse con perfecta sincronía nos pusieron a bailar con Sweet True Lies y No Surrender para retomar de nuevo la presentación de su disco con Hardcore.
Calidad, complicidad y mucho metal fue lo que recibimos por parte de los fineses que consiguieron congregar un muy buen número de personas en su concierto que disfrutaron como nunca.
One Night in Tokyo y End of the World sirvieron de bises esta tarde.
Aparecen a escena en el Mark Reale los valencianos Noctem, dispuestos a enseñarnos su Ritual en el que se presentan con las caras pintadas de blanco y negro y van a tope con su Black y death metal con unos movimientos y actitud de muertos vivientes.
Todas las cabelleras al viento con un headbanding durante gran parte de las canciones que a más de uno le causaría un buen mareo. Ataviados con brazaletes de grandes pinchos y una escenografía de cruces cubiertas con alambres de espino sobre las que cuelgan ensangrentadas calaveras de animales.
Esta jornada nos estaba regalando bandas frescas y de esas que tienen temas bailables. Ejemplo de ello eran Amaranthe, que además contaban con la presencia de Michael Sehlin a las voces guturales como novedad.
Supieron engancharnos desde el principio, y es que el triplete Elyz, Nils y Michael atrae a hasta al más indeciso. Morten venía de tocar con The Dark Side of the Moon y aún así su presencia fue particularmente potente. Johan y Olof no paraban de moverse mientras sonaban Viram, Digital Word, Strong o Helix.
No sabía si pasaría, pero sí, Amaranthine llegó para robarnos el corazón y hacer caer alguna lágrima, y That Song y Drop Dead Cynical para decirnos hasta pronto (o eso nos gustaría).
El sol empezaba a caer, pero contradictoriamente el calor empezó a apretar bajo la cubierta del Mark Reale durante la actuación de Chino Banzai en la que Valentín del Moral nos deleitó con una vuelta a los orígenes clásicos del rock con canciones como Rock Duro.
Más de 50 años lleva ya sobre las tablas y se mueve y canta más que muchos otros más jóvenes. Y aunque parezca contradictorio, Ismael Filteau a los mandos de un teclado invertido bien pudiera ser el que más sudó, ya que no paraba de moverse, saltar y subir la pierna sobre el teclado.
Para finalizar el concierto, Chino ondeó la antigua bandera japonesa con sus rayos. Y entre palmas nos presentó al resto de integrantes de la banda. Acompañado de pequeños solos de guitarra. Para acabar en los últimos compases con un variado juego de luces de muchos colores.
Y a pesar de que seguía siendo de día la oscuridad se cernió sobre Villena con el directo de I Am Morbid. Un concierto denso, como buen concierto de death y como el aire caliente que nos azotaba la cara.
Bastante fijos en sus posiciones y encabezados por David Justin Vincent, conocido por ser el vocalista y bajista de Morbid Angel la banda hizo sonar uno tras otro, acompañados de headbangings desde el público, los temas más míticos de Morbid Angel, incluidos Immortal Rites, Dominated o World of Shit como cierre.
Pudiera parecer que venimos a hablar de un torneo de tenis, pero hoy no es el día. Y es que en nuestro mundillo musical Grand Slam es una banda de rock Irlandesa formada en 1986 y revivida en 2016 por Mark Stanway.
El grupo vino a Villena para presentarnos un rock melódico y bailable. Donde el frontam Mike Dyer junto al resto de la banda, nos fueron guiando por un viaje de película de fantasía con banda sonora de rock.
ALERTA SPOILER! Carezco de objetividad ante esta banda. Y una vez avisados os cuento. Pocas mujeres mueven a las masas como lo hace Alissa White-Gluz, algo que además va cuesta arriba y sin frenos, y es que cada vez veo más gente en sus bolos y escuchando su música.
Claro que las primeras filas estaban emocionados, y no solo ellos, eran muchos los que esperaban ver a Arch Enemy de nuevo en Leyendas, ya que no venían desde 2017.
El primero en salir a escena fue Daniel sobre la batería, y una vez acoplado en su asiento Jeff Loomis y Michael Amott a las guitarras y Sharlee al bajo daban comienzo con Deceiver, Deceiver invitando a unirse a ellos a Alissa, que salió pisando fuerte, con ese porte que dice «aquí estoy, he venido a removeros hasta el alma». Y así lo hicieron.
Los temas se sucedían uno tras otro sin perder tiempo. Pudimos escuchar The Eagles Flies Alone, War Eternal, My Apocalypse (en la que Alissa nos dejó con la barbilla en los pies en esa parte melódica que clavó a la perfección), As the Pages Burn, Nemesis o Fields of Desolation con la que dejaron al público pidiendo más y más, algo que tendrá que esperar a su próxima visita.
Cayó la noche y el escenario Mark Reale rápidamente endureció su música con el power metal de Vicious Rumors. Donde prácticamente todos sus integrantes salieron grabando con sus móviles. Y es que en los tiempos que corren, parece que fuera más importante cuidar las redes sociales que la música y el arte de cada uno propiamente dicho.
Este grupo estadounidense con casi 40 años de trayectoria nos adentró en su universo donde la música tiene mucha fuerza y poder. Y en el que tema tras tema poco tiempo nos dan para coger una pequeña bocanada de aire.
Con las entradas de día casi agotadas para el jueves la gente se hizo hueco como pudo para ver a los reyes de esta edición, Megadeth.
La banda contaba con una iluminación increíble desde el primer momento, lo que nos hizo poder disfrutar lo que realmente veíamos. Unas primeras notas hacían saltar a la banda al escenario, que permanecieron en la parte trasera hasta que la letra los obligó a acercarse a los micrófonos.
No hubo muchas intervenciones entre los temas, pero como es habitual Mustaine se fue moviendo por los tres micrófonos situados en el escenario para estar presente para todos.
Un set list compuesto de clásicos donde nos regalaban Hangar 18, In my Darknest Hour, Sweating Bullets, Dystopia y la sentimental A tout le monde, cantada por todos. Evidentemente sí, sonó Symphony of Destruction.
Un poco antes de lo que marcaba el tiempo Holy Wars… The Punishment Due ponía punto y final a una actuación de gran calidad, con un Mustaine receptivo y en un muy buen estado vocal, y con una banda entregada que dió lo que prometía.
Después de estrenarse en el festival inaugurando la edición del 2022, Celtian fue una de las confirmaciones de última hora para este año y además les tocó competir contra la reina del baile de fin de curso. Hecho que superaron con muy buena nota. Y es que fueron capaces de congregar una muy buena asistencia de público, que además fue creciendo hacia mitad del concierto.
Que hacéis aquí si está tocando Megadeth abajo… Nos preguntaba Sergio. Pero no sabemos quienes son esos. Xana que cambió su habitual indumentaria por un vestido blanco, salió deslumbrado tras la intro para derrochar durante todo el concierto ese vozarron que tiene dentro.
Entre los temas que tocaron esa noche, de los mas destacaron fueron Sendas de Leyenda, Tu Hechizo o Niamh. Diego nos contó el futuro próximo de la banda, cuando anuncio que este próximo otoño entrarán a grabar su próximo disco. Y no quisieron acabar sin perder la oportunidad de agradecer a todos y cada uno de los presentes por elegirlos esa noche.
Mientras, Keep of Kalessin llegaban al Mark Reale. Dijeron que estaban muy contentos de estar en España y lo demostraron. Lo cierto es que un buen número de personas se congregaron para disfrutar de la presentación de su último trabajo Khatarsis.
Para los despistados Keep of Kalessin es una banda de metal extremo originaria de Trondheim, Noruega formada en 1993. Actualmente formada por Obsidian Claw a la voz, teclado y guitarra, Wizziac al bajo y Nechtan a la batería.
Comenzó a sonar la Intro de Das Elfte Gebot y las bailarinas de Feuerschwanz salieron las primeras para ondear las banderas en la noche alicantina. Mientras poco a poco los integrantes fueron apareciendo en escena provocando el jubilo de los los asistentes. Hasta que arrancó de verdad la fiesta con Memento Morí.
Los alemanes revolucionaron el escenario Jesús de la Rosa con sus cálidas melodías pegadizas de folk metal y su cuidada ambientación medieval. Donde no faltaron los bailes junto al fuego como en Ultima Nocte.
Durante el concierto fueron alternando canciones de su último disco con sus temas previos más sonados. Y es que no se quisieron privar de nada haciendo sonar su particular versión de Dragostea Din Tei, donde nadie fue capaz de no saltar, la cual fue una fiesta por todo lo alto. Así como organizando un Wall of Death enorme y varios pogos.
Camisetas al aire y temas como Das Elfte Gebot protagonizaron un concierto de lo más animado y donde no nos dejaron parar en casi ni un segundo. Así que tras esto, me vais a permitir que coga aire un momento.
Legendarios, como su tema, llegaban al escenario del Leyendas bien entrada la noche Tierra Santa, una de esas bandas que las veas cuando las veas siempre están en plena forma y atraen una orda de fans bastante entregados. Por ellos parece que no pasa el tiempo, la verdad.
Y es que a pesar de los años temas como Indomable, Sangre de Reyes o Drácula son coreados por las masas con total entrega. También hay que reconocerles el éxito de su buen estado sobre el escenario ya que tanto Ángel a la voz como Roberto, Juanan, Dan y Alex, dan el 100% en cada concierto y te atraen, un poco como las moscas a la luz.
Destino, que el último disco de la banda tuvo bastante poca representación, tiraron más de los clásicos como La Leyenda del Holandés Errante, Legendario o La canción del pirata, y la verdad es que con el cansancio de todo lo que llevábamos encima se agradecieron y se disfrutaron, como el aire fresco que empezaba a correr en Villena.
Si Dünedain llenó el Mark Reale el año pasado, este repite con el honor de hacerlo en el Main Stage. Y a pesar de ser la banda que cerró la noche, mucha gente no se quiso perder su aparición en el Jesús de la Rosa. Hecho al que no quisieron dejar pasar la oportunidad de agradecer en múltiples ocasiones.
Si alguno ya se había quedado sin energías, la banda al completo y en especial Carlos se encargaron pronto de recargarselas. Saliendo al escenario derrochando fuerza y ganas hasta tal punto que casi desmonta parte del equipo. Y es que no paró de moverse de punta a punta contagiando a los allí congregados que no pararon de saltar, cantar y levantar los brazos sobretodo en temas como 1000 golpes o Unidos.
Y para cerrar la segunda jornada en el Mark Reale Mind Driller descargaba toda su fuerza para agotar las últimas energías que nos quedaban.
Los valencianos traían un repertorio muy especial, ya que querían celebrar su 10º aniversario haciendo un extenso repaso por toda su discografía, por lo que pudimos disfrutar de temas de toda su carrera como Ritual, Psycho, M4niky, Game Over o Rotten.
Metal y electrónica fusionados de manera brutal, acompañado por la mezcla de voces melódicas y guturales de V Stone, Daniel N.Q. y Estefanía Aledo, mientras Javix a la guitarra y Pharaoh al bajo acompañaban la puesta en escena con una performance constante. Reimon a la batería, aunque un poco más escondido también formaba parte de todo este show cargado de intención y detalles.
Un muy buen broche para cerrar lo que ya era el ecuador de este Leyendas.
Por Javier Paredes e Irene Kilmister.