The Broken Horizon + A Dark Reborn + The Bering
Sábado 29 de Octubre de 2020
Sala Bóveda, Barcelona
Los navarros The Broken Horizon llegaban a Barcelona el pasado viernes para presentarnos su último trabajo Until Silence Speaks, publicado el pasado mes de febrero y que durante este 2022 los ha llevado por salas de un gran número de ciudades e incluso les otorgó un pase por Resurrection Fest.
Pero The Bering eran los encargados de abrir boca e ir calentando la sala, una sala que por cierto contaba con un muy buen número de seguidores, aún con la oferta de conciertos, festivales y fiestas con las que contaba la ciudad este fin de semana.
The Bering se crea en Cataluña el pasado 2020 (según todos los registros de redes sociales) y por el momento cuentan con la publicación de cuatro sencillos desde este mes de abril.
De hecho, Decay, el primero en estrenarse fue también el primero en sonar esa noche. Tras él pudimos escuchar Overthink y el medio tiempo Blue, con el que presentaban a Alejandro, bajista, el cual se estrenaba esta noche con la banda.
Y visto que a pesar de los esfuerzos titánicos de la banda por hacer moverse al público, con una gran puesta en escena, temas potentes y un gran potencial, su frontman se lanzaba con Fake Pace al público. Una vez las mentes más despierta la banda nos presentaba «una lenta», Samsara y tras esta el inedito Let Me Down, que pronto verá la luz.
Guardaron la artilleria pesada para el final, y es que la recién estrenada Schizophrenia (apenas dos días antes) les sirvió de cierre.
A DARK REBORN celebraba su primer aniversario.
Y es que la banda procedente de Girona con Lur (ex-Morphium) a la cabeza, llegaba a la Sala Bóveda para celebrar el primer aniversario de My Light.
En este caso teníamos delante una banda joven pero con una gran calidad que cuenta con Ivan Sixto al bajo, Denis Duran y Thomas Höffken a las guitarras y Albert, que por cuestiones médica esa noche ayudaba desde la mesa de luces, a la batería. Saul Rosales fue el encargado de los bombos y platillos esa noche.
La intro Before the Dawn dió paso a Shadows y I can’t breathe, las primeras en sonar, dos temas con estribillos cañeros donde, desde ya bien pronto, Lur dejó claro su potencial con un altísimo nivel tanto en las partes guturales como en las melódicas, o incluso con susurros que puntualizan ciertas partes del tema.
Dark, mantuvo la línea de los anteriores mientras que con Loss nos invitaba a parar unos segundos a recordar a toda esa gente que hemos perdido y que, como bien dijo Lur, con la pandemia a aumentado mucho más.
La noche seguia a ritmo de Break the ropes y, con palmas en alto recibiamos Catharsis, tercer single de la banda, con ese característico duo de guitarras como del comienzo. Freedom y Dust in the Ground eran los encargados de poner punto y final a un gran concierto, antes de dar paso a los invitados de lujo de esa noche.
Until Silence Speaks por bandera…
The Broken Horizon eran los encargados de cerrar la noche del sábado y, a pesar de no poder acabar su set list consiguieron poner la sala patas arriba durante la hora que estuvieron sobre el escenario de Bóveda.
Una épica intro daba paso a Oui y Rotten Blood dos temas de su anterior trabajo.
Pocos fueron los que quedaron impasibles ante el metalcore de los navarros. Joanes Esain sembraba las bases junto al bajo de Alex Fuente, formando una dupla sólida y sin fisuras sobre las que Alex y Jun Núñez hacen su magia a las seis cuerdas. Y sobre todo esto, con el soporte de sus compañeros guitarristas, Victor Parra se deja la piel con una interpretación desgarradora de cada uno de los temas.
Sinceramente el de esa noche era un público difícil pero no vi a ninguno, y en especial a Victor, que se movía entre el escenario y la barra, perder ni un mínimo de esa fuerza arrolladora que acabó arrastrando con él a toda la sala en un gran pogo.
Con un wall of death llegaba Dead World, seguida por Enough (is Enough), canción contra el maltrato a la mujer, ambas de su último plástico.
Fueron saltando entre los temas Desolation y los del nuevo Until Silence Speaks , y sin quitar el pie del acelerador nos regalaron Nothing gleaming, Falling Apart, Haunting me y Heterodoxy, un grito contra la iglesia.
Del final se encargaban Relentless, con un gran trabajo al bajo y Before Becoming Lost, que unifica un riff directo a la nuca con unas voces guturales muy bien ejecutadas y combinadas con ciertos pasajes melódicos. Un combo perfecto para despedir la noche del sábado.
Por Irene Kilmister.