LEYENDAS DEL ROCK
VIERNES 9 DE AGOSTO
VILLENA (ALICANTE)
La tercera jornada del Leyendas del Rock, el viernes 9 de agosto, empezaba temprano. Para los más valientes que se atrevieran, a las 12:00 del mediodía en la Plaza Mayor de Villena había un concierto en acústico de Saurom.
Tras este acústico, se podía seguir la ronda en el Camping Stage, donde Salduie y Lándevir, con su folk metal, amenizaban la hora de la comida actuando a las 14:00 y 15:00 respectivamente.
El día estuvo marcado por la repentina y triste noticia de que Dee Snider se caía del cartel un día antes de la actuación debido a cancelaciones en los vuelos desde Nueva York. A contrarreloj fue imposible encontrar un sustituto de tal calibre, y esto concedió a los finlandeses Beast in Black tocar en el escenario principal y más tiempo del asignado previamente. El cambio de escenario conllevó también aplazar la actuación de Morphium, que ocuparon el horario y escenario donde anteriormente iba a tocar Beast in Black, y los aragoneses Salduie tuvieron la oportunidad de tocar dos veces en el mismo día, ocupando la posición de Morphium en el Mark Reale Stage a las 16:50.
CRISIX
Llegábamos a Villena con la comida en la boca y con casi 40º a las 16.40h para no perdernos ni un solo minuto de la actuación de los catalanes Crisix y su ultra thrash metal. Crisix no solo está siendo reconocida (casi) como merecen a nivel nacional, si no que ya forman parte de carteles de grandes festivales europeos, como el reciente Wacken Open Air de Alemania.
Juli Bazooka, cantante, se recorrió cada milimetro de escenario a la carrera durante los minutos que duraba el espéctaculo, mietras que los guitarristas B.B. Plaza y Albert Requena cogian carrerilla para saltar desde las tarimas que rezan «PSYCHO CRISIX WOLD»
Por motivos de salud Javi, el batería, no pudo acudir a la cita, y para sustituirle contaron con Marcelo Aires, aunque sus compañeros no olvidaron su falta y le mandaron un caluroso (nunca mejor dicho) saludo y desearle una pronta recuperación.
«Leech Breeder» single del su último disco Against The Odds abría la tercera jornada de Leyendas del Rock. Además, temas como «Bring ‘em to the pit«, «Ultra trash» o «Conspiratoria» caldearon el ambiente para la que se antojaba una jornada intensa.
SALDUIE
Cancelaciones de última hora, cambios de horario y de escenario situaron a Salduie abriendo el escenario Mark Reale en la jornada del viernes tras su actuación en el camping a medio día. Para quien no los conozca Salduie son una banda de folk/death metal de Zaragoza que venían a Leyendas del Rock a presentarnos su nuevo disco, Viros Veramos, publicado el pasado mes de marzo. Los maños no se quedan cortos en recursos y llenan el escenario con sus ocho componentes: David con la gaita, whistles, dulzaina, Víctor a las guitarras, Bouzouki irlandés y Mandolina, Diego Bernia a la voz gutural y melódica, Diego Royo a loz melódica, Sergio a la batería y bodhran, Dani al bajo, Nem Sebastián a la voz melódica y vientos y Sergio Couto a la guitarra eléctrica.
«Sedesisken» y «Turma Sallvitana» abrían esta tarde en Villena, con temperaturas que superaban los 39° a la sombra, algo que importó bastante poco a los allí presentes. Tenía muchas ganas de ver esta banda en directo, pues tengo los discos rayados de darles vueltas, y era una asignatura pendiente aún. Tengo que decir que entiendo que dar dos seguidos en estas condiciones no tiene que ser fácil, pero todos y cada uno de los allí presentes le echaron ganas e ilusión y, sobre todo mucha fuerza, que se transmitió a todos allí presentes. Muchos de los seguidores, a pesar de hacer escasas dos horas de su primer concierto, aguardaban con ganas en las primeras filas.
Hubo problemas técnicos y el sonido falló al final de «Carus de Sekaiza«. Técnicos corriendo de arriba a abajo, caras preocupadas… ¿Creéis que importó? Ni un poco, pues los seguidores de la banda, que no eran pocos, y ellos mismos, se dejaron las gargantas e hicieron «A brindar» a capella sin que los ánimos decayeran ni un poco.
Allí los dejé anunciando el último tema, «Olindico«, del que publicarán un vídeo en directo que fue grabado esa misma tarde, y para la que contaron con Dani Nogués de Lèpoka.
AVATAR
La banda de metal sueca liderada por el rey –Jonas Jarlsby– y el payaso –Johannes Eckerström– interpretando su particular circo, se presentaban como una de las bandas y las actuaciones más atractivas de la jornada. El resto de miembros no se quedan atrás y John Alfredsson a la batería, Henrik Sandelin al bajo y Tim Öhrström a la guitarra interpretan su propio papel con camisas de botones cual acomodadores.
Su peculiar puesta en escena no ha dejado indiferente a nadie, y a medida que van haciendo mella en más y más público, la audiencia que se agrupa para verlos es cada vez más abundante. No es para menos, pues aunque no son los pioneros en este estilo o subestilo de “shock rock”, son únicos en utilizar imágenes de payasos aterradores, uniformes señoriales, capas y coronas.
Tanto es así que pudimos ver la primera fila del público, entre otros muchos asistentes, disfrazados y ambientados al mismo estilo Avatar. Hay grupos que se centran sólo en la música y eso es lo que ofrecen al espectador, pero después están otras bandas como Avatar dónde el espectáculo es igual importante que la parte musical, un aspecto añadido para agudizar los sentidos e introducirse en el loco mundo de Avatar.
Empezaron su show con el particular “Hail the Apocalypse”, a las que siguieron temas de su último trabajo Avatar Country, en el que se inspiran para la ambientación actual como “A Statue of the King”. Entre tema y tema, The Clown nos invitaba con sus particulares discursos a entrar en el mundo de Avatar y en su circo y sentirnos como uno más, a medida que se iban sucediendo los temas, quizá los discursos se alargaron algo más de lo debido, hecho que restaba un valioso tiempo para haber interpretado algún tema más, pero necesario para continuar con la función.
Nos sorprendieron con “The Eagle Has Landed” a mitad del show en la que el público, un poco tímido al principio, se desinhibió del todo y saltó en euforia. Con la coronación del rey hacia el final de la actuación, daban paso a “The King Welcomes You To Avatar Country” y terminaban con su justa introducción al tema a ritmo de “Smells Like a Freakshow”, que el público acogió de buena gana y cantaron al unísono junto con la banda.
Sin duda fue una actuación que rozó el sobresaliente tanto en lo musical como en puesta en escena y Avatar, en su estilo, se están convirtiendo año tras año en unos dignos referentes.
Setlist Avatar:
- Hail the Apocalypse
- A Statue of the King
- Paint Me Red
- Bloody Angel
- The Eagle Has Landed
- Get in Line
- Let It Burn
- For the Swarm
- The King Welcomes You to Avatar Country
- Smells Like a Freakshow
DELAIN
Llegaba la hora del romanticismo y la dulzura a Villena, pues era el turno de Delain que venían a presentarnos su nuevo trabajo Hunter’s Moon, publicado el pasado mes de febrero. Vestidos en tonos rosa, rojos y negro los componentes fueron saltando al escenario uno a uno para comenzar con «The Monarch«, tema incluido en su anterior disco Moonbathers, justo antes de que la bella Charlotte Wessels, vestida con un tutú voluminoso en color rosa fucsia, al igual que el resto del vestuario de la banda, se uniera a sus compañeros.
Nos dejaron disfrutar de temas de su último disco como «Hands of Gold«, «The Glory and the Scum» o «Masters of Destiny«, mientras sonaban, entre uno y otro, joyas del resto de su discografía como «Suckerpunch«, «Fire with Fire«, «Here Come the Vultures» o «Mother Machine«.
Charlotte no soltó la brillante sonrisa durante todo el concierto, animando al público que respondió estupendamente durante todo el show. Un gran trabajo también el de Timo Somers a las guitarras, que acompañó a la perfección además con las voces guturales, mano a mano con el bajo de Otto Schimmelpenninck, sin desmerecer las contundentes bases rítmicas de Joey Marin de Boer. Para «Don’t Let Go» contaron con una supercolaboración especial, y es que a Martijn Westerholt le acompañó en los teclados su hijo.
Para el final «We Are the Others» y «Pristine» cierran la gran actuación de los neerlandeses.
DÜNEDAIN
Considero a Dünedain una de las bandas de heavy metal melódico español más infravaloradas actualmente. Tienen lo necesario para llegar lejos pero tristemente algo se quedó en el camino, porque pese a que siguen sacando material de buena calidad, su fama no crece en consecuencia a ello.
Venían presentando su último disco “Memento Mori” que salió apenas dos meses y así pudimos escuchar varios temas como “A un paso del cielo”, “Eterno”, o “Memento Mori”.
Desde que Carlos Sanz (Nano) se incorporara a la banda como segunda voz principal de Dünedain junto a Tony, estos se reparten las voces principales y coros de las canciones, consiguiendo una dupla de grandísima calidad, aunque he de admitir que me declaro fan confesa de la voz de Tony.
Además de su papel vocal, Tony sigue teniendo el papel principal a la guitarra, acompañado de Mariano Sánchez a la guitarra rítmica, Miguel Arias a la batería y Alberto P. Velasco al bajo. Siempre han contado con un sonido excepcional en sus grabaciones y sus directos mantienen este sonido intacto, algo que también pudimos ver en su actuación en el Leyendas.
Supieron a poco los escasos 50 minutos con los que contaron de actuación, pero a pesar de la brevedad de la ocasión, pudimos escuchar algunos temas que se han convertido en “hits” de la banda, como “1000 golpes”, “Por los siglos” o “Corazón de invierno”. Temas que ahora sí todo el mundo aplaudió y cantó -más que al menos los temas más recientes- y es que son temas que se han convertido en imprescindibles de la banda.
Setlist Dunedain:
- Intro
- A un paso del cielo
- Legado
- Vuela
- Memento Mori
- Eterno
- 1000 golpes
- Fiel a mi libertad
- Por los siglos
- Corazón de invierno
ELUVEITIE
Los suizos Eluveitie llegan a España para presentarnos su folk metal que ha ido abriéndose paso entre el público metalero y consiguiendo cada vez más adeptos a sus filas, tanto así, que según caminábamos por campo del Leyendas podíamos ver gente que «imitaba» las vestimentas de la banda, entre tanta tachuela y tanto cuero.
Chrigel Glanzmann, fundador, es también la voz principal, además de tocar el tin whistle, mandola, guitarra acústica, flauta de tres agujeros, bodhrán, buzuki y arpa. Y es que si algo caracteriza a Eluveitie es su gran despliegue tanto de músicos como de instrumentos direfentes, muchos de ellos practicamente desconocidos por gran numero de los presentes. Kay Brem se encarga del bajo mientras que las guitarras llegan de manos de Rafael Salzmann y Jonas Wolf y Alain Ackermann asienta la base rítmica a la batería.
A la gaita y tin whistle también encontramos a Matteo Sisti, Nicole Ansperger al violín. Michalina Malisza la zanfona y Fabienne Erni completa la formación a la voz, arpa celta, mandola.
Para mí ha sido todo un descubrimiento en esta edición, ya que era una banda que, a pesar de reconocer su nombre, no había escuchado anteriormente. Todo el despliegue sobre el escenario me sorprendió y, lo más importante, me gustó lo que escuché. La dulzura de los instrumentos, mezclada con bases y voces más heavys captaron mi atención y, sin duda, les daré más de una escucha a conciencia.
Abrieron la actuación con «Ategnatos» tema que da nombre a su último trabajo, del cual también pudimos escuchar «Deathwalker», «Ambiramus», «Breathe» o «Rebirth», entre grandes composiciones de sus anteriores trabajos como «The Call of the Mountains«, «Worship» o «Havoc«
Con la caída de última hora de Dee Snider y cambios de horarios, Morphium acabó ocupando la parte central de la tarde del Mark Reale-Riot, en el lugar en el que iban a hacerlo Beast in Black. Sin duda, una de las bandas bien marcada en los horarios y con alarma en la app, pues me parecían una de las más interesantes del cartel y no quería perdérmela. E hice muy bien!
El metal extremo llegaba a una carpa prácticamente llena con «Victim of your shame» como aperitivo a lo que nos esperaba. Centrándose principalmente en su último trabajo nos dejaron disfrutar también de “Mud For My Thrist”, “You’d Rather Be Blind”, el muy coreado “All You Are”, “Made Of Scars” o “What Lies Behind Words”
Presentaron además un nuevo tema “Insorcism” y cerraron la tarde con “Everybody Is Dead In This House”, tema del que se presentó su último videoclip el pasado mes de marzo.
La calidad musical del Morphium es indudable, pues la batería de Mori Kodax junto al bajo de Eugen, hacen que las guitarras de Max Kabraz y Victor Lestat se muevan en perfecto equilibrio entre la caña mas abrumadora y la velocidad precisa, dejando que la voz de Alex Bace llegue a calar en todos los tímpanos presentes, deleitándonos y enganchandonos poco a poco, el cual además interactúa con su público constantemente, bajando del escenario y cantando desde la valla a las primeras filas.
BEAST IN BLACK
Y llegaba el momento de la banda que más esperaba de todo el Leyendas. Bueno, a ellos y Avantasia. Veo un futuro impensable en esta banda que fundó Anton Kabanen y a cada concierto que dan, y cada disco que sacan, se superan cada día más. Con su power metal de base, no tienen miedo a arriesgar con influencias del rock ochentero, sintetizadores, metal sinfónico. El registro vocal de Yannis Papadopoulos es en parte el culpable -o la gran virtud, según como se mire- de que este grupo presente un abanico tan amplio, y es que es capaz de abordar desde guturales y graves, a tonos agudos y que se han llegado a considerar femeninos. Toda una fiera que estoy segura que estos Beast in Black no dejarán escapar.
Se criticó que los finlandeses tuvieran que tocar en el escenario Mark Reale, y por un golpe de gracia, que dejaba fuera del festival a Dee Snider, la banda daba el salto al escenario grande y con un cambio de horario significativo, a las 21:00 de la noche saltaban al De La Rosa Stage ante un respetable considerable.
El equipo que forman Anton Kabanen a la guitarra, Yannis Papadopoulos a la voz, Kasperi Heikkinen a la guitarra, Máté Molnár al bajo y Sami Hänninem a la batería roza la perfección y cuando subieron al escenario contaron con un sonido y una potencia completos desde el principio. Empezaban su show con “Cry Out for a Hero”. Siguieron con varios temas de su anterior disco Berserker como “Beast in Black”, “Born Again” o “Eternal Fire”, pero sobre todo pudimos escuchar temas de su último trabajo From Hell With Love y con “From Hell With Love”, “Sweet True Lies”, “Die by the Blade” o “Unlimited Sin”, dieron buena cuenta de ello. Con sólo dos discos en el mercado, es impresionante como todo el público cantaba y recitaba a la perfección todas las letras en inglés. Con “Blind and Frozen”, uno de sus temas más aplaudidos y “End of The World”, tema apropiado para ello, terminaban su actuación y finalizaban saliendo al escenario despidiéndose al sonido de fondo de “No Easy Way Out”. Terminaban con 20 minutos de sobra, tiempo que estaba programado para la actuación de Dee Snider y que, bien porque la banda no tenía los temas preparados o por otros motivos, no pudieron copar y la verdad es que nos dejaron con ganas de más. Una pena porque estos minutos sobrantes se podrían haber aprovechado para tocar apropiadamente otros temas como el “No Easy Way Out” que sólo sonó de fondo u otros tan aclamados como “Crazy, Mad, Insane”.
Les auguro un gran futuro a Beast in Black, recuerden mis palabras.
Setlist Beast in Black:
- Cry Out for A Hero
- Unlimited Sin
- Beast in Black
- Eternal Fire
- No surrender
- Born Again
- Die by the Blade
- Sweet True Lies
- From Hell With Love
- Blind and Frozen
- End of the World
AIRBOURNE
Los australianos eran el plato fuerte del tercer día. Su hard rock sigue ganando adeptos día a día y aunque se les llegó a tildar de ser los herederos de los mismísimos AC/DC, la verdad que su carrera se ha quedado unos escalones por debajo. Sin embargo esta comparación está muy cerca de la realidad, tras quince años de intensa carrera y cuatro álbumes a las espaldas, Airbourne han escalado de forma imparable a base de constancia, trabajo y unos directos llenos de energía y pasión. Además, su peculiar decorado en los escenarios repletos de amplificadores y focos ya son una seña identitaria suya.
Pasadas las 22:00 la intro de Terminator hacía temblar el suelo del cmapo de fútbol de Villena, hasta el punto de introducirse en nuestro interior, instantes antes de que Airbourne saltara al escenario al ritmo de “Ready to Rock”.
El cuarteto australiano enlazaba este primer tema con “Too Much, Too Young, Too Fast” y “Boneshaker”, temas muy reconocibles de la banda y que sirvieron para meterse desde el principio a la audiencia en el bolsillo, sin duda una estrategia genial. Estos temas se encargaron de animar al público, pero por si todavía quedaba algún reticente en el recinto, el mismo cantante bajó del escenario guitarra en mano a las primeras filas del público al ritmo de “Too Much, Too Young, Too Fast” y empezó el espectáculo en el que se reventó una lata de cerveza en la cabeza para posteriormente mojar al público con ella.
Matt Harrison a la otra guitarra, Justin Street al bajo y Ryan O’Keeffe a la batería, siempre han relegado el papel principal o el protagonismo a su cantante, pero sí es verdad que en ciertos momentos se echó en falta la complicidad entre ellos o que el propio O’Keeffe hiciera más partícipes a sus colegas. Poco pudimos reparar en ello pues el show se sucedió de forma vertiginosa entre canciones como “Girls in Black” o “Heartbreaker”. Si Airbourne te atrapa te metes en su show de lleno y disfrutas sin apenas ser consciente de que el tiempo pasa. Y de forma tan galopante que cuando nos quisimos dar cuenta O’Keeffe ya nos estaba despidiendo y advirtiendo de que el show llegaba a su fin dando paso a sus temas más emblemáticos y populares, que fueron “Live It Up”, “Raise the Flag” y “Runnin’ Wild” en los que el público enfureció y todos a una coreamos cada uno de los tres temas con los que los australianos cerraban el concierto.
Pese a que he de decir que poca diferencia he visto en sus shows desde que los viera en 2016 en Barcelona -me sorprendió que tanto el setlist como el espectáculo fuera TAN parecido-, sin reparo puedo afirmar que fue la actuación de la noche, y de la tercera jornada.
Setlist Airbourne:
- Intro de «Terminator 2»
- Ready to Rock
- Too Much, Too Young, Too Fast
- Boneshaker
- Girls in Black
- Rivalry
- Heartbreaker
- Bottom of the Well
- Breakin’ Outta Hell
- It’s All for Rock ‘n’ Roll
- Stand Up for Rock ‘n’ Roll
Encore:
- Live It Up
- Raise the Flag
- Runnin’ Wild
WARCRY
No hay Leyendas del rock si Warcry no viene a actuar, esto es así. Hemos perdido la cuenta de las ediciones en las que los asturianos han actuado en este festival, pero sin duda, cada año no traen algo nuevo. Si algo no falla nunca son una horda de seguidores que van allá donde actúen, y por eso, una pancarta de Iberia Warcry Fans, el club oficial de España, vestía el interior de la valla del escenario De la Rosa. Los Garcías, Víctor a la voz, Pablo a la guitarra y Roberto al bajo, acompañados por los grandiosos teclados de Santi Novoa y la potente batería de Rafael Yugueros venían a conquistar otra edición de Leyendas del Rock.
Las chispas inundaron el escenario y, así «Luz del Norte» era la señal del comienzo de un concierto increíble, de los mejores que he podido ver de la banda en tiempo, sin duda. Todo el escenario cuidado en detalle, con una pantalla gigante en la parte de atrás que iba chivándonos las letras de los temas (aunque con un poco de retraso). Disfrutando tema tras tema con una elección de set list bastante acertada para mi gusto, con «Nuevo Mundo«, «Quiero oírte» o «Alma de conquistador«, para los primeros momentos y las que siguieron «Devorando el corazón» y «El guardián de Troya» en la que el fuego volvió a aportar luz y majestuosidad.
El final de «Capitan Lawrence» nos dejó con un disparo de serpentinas doradas, de esas que siempre consiguen arrancar un oohh hasta al más heavy, que, por mucho chaleco de cuero, cadenas y pinchos, se canta la profunda letra de «Aire» o la alentadora de «Tú mismo» de arriba a abajo.
Si algo caracteriza a Warcry, a parte de la peculiar voz de Víctor García que se conserva en la misma buena forma que al principio, son las letras con un profundo sentimiento metalero, como «Ardo por dentro» o, la encargada de cerrar «Hoy gano yo«. Y es que ojalá el año que viene al ponerse el sol vuelva a haber otro concierto como este, y su gente se reúna y les acompañen como lo han hecho en esta edición.
KOMA
El regreso de los navarros tras seis años de silencio ha dado de que hablar, tanto así, que han logrado sold out en un gran numero de ciudades, repitiendo fechas y formando parte de muchos festivales de nuestro país. Y es que, como bien dicen: La fiera nunca duerme!. El viernes era el turno de que los asistentes al Leyendas del Rock gozaramos del directazo de Koma, rápido, intenso y brutal, como era de esperar.
El primero en salir al escenario fue Juan Carlos Aizpún en la batería que daba el pistoletazo de salida con los primeros golpes de «Menos mal» tras los que salieron Rafa Redín (bajista) y Natxo Zabala (guitarra). El último en pisar las tablas del escenario Azucena fue el guitarrista y cantante, líder del grupo, Brigi Duke, el cual nos deleitó no solo con su magnífico estado físico y vocal, si no con sus divertidas caras hacia las primeras filas. Gozaron de un gran sonido durante toda la actuación y, en cuanto a lo visual, solo les acompañaba una loca trasera con la portada de su último disco, en el cual regrabaron temas de toda sus discografía, mejorados y adaptados a la actualidad de la banda.
Rafa y Natxo intercambiaban sus puestos en el escenario a carreras mientras sonaban «Tío Sam«, «Protestantes» o «Vaya carrera que llevas, chaval» que fueron las encargadas del abrir 50 minutos de show que fueron exprimidos y muy bien aprovechados, dándome la sensación, a veces, de que los temas estaban un poco acelerados con respecto a la versión original, pero es que el heavy metal de Koma, con ese puntillo punkarra en algunos momentos, pide eso, velocidad y cuellos rotos (aun me dura la contractura, por cierto!)
Tema tras tema fuimos pasando por «El Muro de Berlín«, «La almohada cervical«, » El pobre«, «Caer» o, una de las más coreadas de la noche «Imaginatelos cagando«. Cuando creíamos que llegaba el fin nos dejaron otro chorro de temazos con «Sakeo«, del último trabajo publicado por la banda antes del parón, «Sonajero» que nos deja esos pequeños pasos de salsa por parte de Brigi y «El Marqués de Txorrapelada«, «Aquí huele como que han fumao» y «Mi Jefe«, que prácticamente sin interrupción dieron paso, al igual que el disco a la rapidísima «El infarto«.
Brigi salta del escenario con la guitarra colgada, animando a sus compañeros desde las primeras filas junto a sus seguidores, y deja a Natxo en posesión del micrófono central para comenzar «Bienvenidos a degüelto«, que cerró una actuación digna de mención y disfrute, y es que había muchas ganas de que una banda como Koma volviera a los escenarios y no lo digo solo yo.
Ya no pudimos volver al Mark Reale Stage hasta la actuación de Dry River y entre tanto tocaron los madrileños Bella Bestia con su hard rock, los holandeses Pestilence con su death metal, los neerlandeses Mayan con su death metal sinfónico y Unleashed desde Suecia con su death metal y tras Dry River, Uzzhuaïa desde Valencia con su hard rock.
DRY RIVER
Y para mí llegó lo que sin duda fue una de las sorpresas del festival, y un descubrimiento si se puede, aunque ya les había escuchado, y mucho. Soy poco asidua a escuchar las recomendaciones de mis amigos, pero esta hizo mella en mí, y en qué bendito día me recomendaron a este grupo castellonense. También venerable el momento en que Dry River decidieron dejar de hacer versiones de rock clásico y pasarse a hacer su propia música.
Acariciando las 2:00 de la mañana, no importaba la hora, pues yo ya me había reservado las fuerzas para ver a este ansiado grupo. En cerca de 60 minutos nos hicieron viajar por una mezcla de estilos donde basados en el metal daban toques de progresivo, funk, jazz, soul, clásicos, incluso insinuaciones al tango o música latina. Se nota además que tienen fieles seguidores, pues la primera fila quedaba eclipsada por fanáticos vestidos con los mismos trajes que la banda tenía pensados para la ocasión.
Con la ambientación en este último disco 2038, empezaban el concierto situándonos en un espacio futurista y dejándonos claro que estábamos en 2038. La antesala del por qué y el sentido al resto del concierto. Con “Fundido a negro”, para mí uno de los temas claves de la banda, empezaban el concierto, y maldije por haberme perdido la mitad del tema por llegar tarde. Ataviados todos con sus trajes de color magenta, camisa blanca y corbata negra, y acompañados de dos personajes con máscaras antigas, empezaban “Rómpelo”. Una de las peculiaridades de este grupo es que el papel de la voz está repartido entre todos los integrantes: Carlos Álvarez a la guitarra y los teclados, Ángel Belinchón como vocalista, Martí Bellmunt a los teclados, guitarra, y saxo, Pedro Coral a la batería, David Mascaró al bajo y Matías Orero a la guitarra, todos y cada aportan su granito de arena a las voces.
Se agradece por otra parte ver una banda que no tira de pregrabados en ningún momento del concierto, todo, exclusivamente en directo. Una actuación llena de cambios de tonalidades, de emociones dispares y momentos psicodélicos y extraños que en un final hacen que todo tenga sentido es lo que ofrecieron Dry River.
Con “Irresistible”, “Me va a faltar el aire” y “Traspasa mi piel”, terminaban un concierto con un público pletórico y totalmente entregado. Nos dejaron con ganas de más y ojalá que pronto volvamos a verlos en escenarios como el Leyendas del Rock. Se agradece que haya festivales que arriesguen por apuestas un poco más diferentes como Dry River.
Setlist Dry River:
- Fundido a negro
- Rómpelo + fragmento de Con la música a otra parte
- Prog Medley
- Irresistible
- Me va a faltar el aire
- Traspasa mi piel
SAUROM
Se notaba que esta jornada llegaba a su fin, pero ahí estaban Saurom para terminar de redondear este gran tercer día de Leyendas del Rock.
Lo primero que le llamó la atención no fue el colorido bajo de Jose Gallardo que destacaba mientras iba y venia de un lado a otro, o la característica indumentaria del virtuoso Narci, fu, sin duda, el despliegue de pirotecnia y fuego que les acompañó durante todo el show.
Seguramente los más fans, esos de las primeras filas que les han visto miles de veces disfrutaron como enanos con un set list algo «diferente», para mi gusto poco acertado para un festival donde cuentas con 50 minutos y miles de ojos y oídos puestos en tí. Aunque además de «Lejos del mar de rosa«, «El arquero del Rey«, «Sandra» o «El laberinto de los secretos» también sonó la archiconocida «El monte de las ánimas», con la que comenzaron el concierto.
Contaron con la magnífica colaboración de Xana Lavey de Celtian para «Mujer Dormida» y «La músa y el espíritu«, y con su compañero Diego Palacio aportando colorido con su flauta para cerrar la actuación.
Aunque si hay alguien a quien hay que reconocerle el merito y condecorarlo como «colaborador del Leyendas 2019» ese es Dani Nogués, cantante de Lèpoka, al cual Miguel A. Franco retó a un duelo como introducción a «El círculo juglar«.
Acababan con «La taberna» con, como de normal para los de Cadiz, más gente en el escenario casi de los que cabían y eso solo puede significar una cosa: Saurom es una de las bandas más queridas de nuestro país, por su simpatía y el calor que desprenden tanto arriba como una vez fuera de las tablas.
Redacción y fotografías por Irene Kilmister y Yolanda Sabater.