ANATHEMA – A SORT OF HOMECOMING
K-SCOPE
9.5 / 10
Si antes de su publicación hubiera que apostar si esto iba a ser un discazo, en las casas de apuestas apenas pagarían un céntimo por cada euro apostado. A medida que pasa el tiempo, y a pesar de sus escarceos electrónicos con más o menos éxito, parece evidente que el tono acústico parece el formato en el que se encuentran cada vez más a gusto. Si a eso se le añade el entorno único de la catedral anglicana de su Liverpool natal y un público respetuoso, el resultado solo podía ser tan bueno como ha sido.
Obviamente, la mayor parte de los temas están escogidos de los tres álbumes de estudio publicados en esta década, aunque hay margen para algún tema antiguo como la maravillosa “Temporary peace”, la sorpresa de “Electricity” y su infaltable canción emblema “Fragile dreams” para cerrar el concierto. Es curioso ver cómo han dado la vuelta en la interpretación a canciones como “Distant satellites”, “Take shelter” o “Dreaming light”, en la que permiten que Lee Douglas se luzca una vez más con su inigualable voz.
Lo demás, aún pudiendo ser previsible, no deja de ser tremendo. La ayuda de Anne Phoebe al violín y David Wesling al cello en canciones como “Anathema” da mucho color a los temas, y el sonido de “Thin air”, “Ariel” o “A natural disaster” nos recuerda una vez más por qué esta banda es única. El único punto negativo del disco es la falta de continuidad en la grabación, con cortes claros entre tema y tema, lo que resta un punto de implicación en la escucha, pero ciertamente es un mal menor. Aunque sé que muchos escucharéis este disco en Spotify u otras plataformas, no puedo evitar cerrar alabando la elegancia del formato disco-libro, tan habitual de los productos de Kscope. Sea como fuere, no os perdáis esta joyita.
Miguel Hernández García (Fiti)