LORDI + BLOOD WHITE
MADRID – 10 OCTUBRE 2025
REVI LIVE
ORGANIZA: MADNESS LIVE
Han pasado 19 años desde que Lordi soprendiera a medio mundo ganando el festival de Eurovisión. En una época donde las redes sociales estaban aún en pañales, se convirtieron en todo un fenómeno viral mucho antes de que ese término tuviera algún significado.
Podrían haber sucumbido al peso de su propio éxito y convertirse en la típica banda de «one hit wonder», pero no, la banda demostró tener los pies en el suelo y siguieron labrando su carrera disco a disco, explotando ese hardrock accesible adrezado de toques divertidos y bizarros tan marca de la casa.
No es que hoy en día sea una banda de masas, pero al menos goza de un buen predicamento entre la audiencia rockera como demuestra el hecho de que agotaran todas las entradas en su concierto en la capital. Con esos ingredientes de una sala llena, de una banda aderezada con su habitual imaginería, al igual que un escenario adornado para la ocasión, y de un horario tempranero para que sus fans más jóvenes puedan acceder sin problemas, Lordi ofreció todo lo que se podía esperar de ellos.
Y es que un concierto de Lordi es ante todo un espectáculo orientado a la diversión, gracias no solo a sus disfraces monstruosos y todos los toques de teatro bizarro al más puro estilo Alice Cooper, si no que Mr Lordi es un frontman que sabe manejar como nadie a la audienca, animando y levantando sonrisas con sus palabrotas en español (culo, tetas, polla, follar…), y si además sus canciones como «Legends», «Chopping», «Daddy» o «Fangoria» llegan pulcras y con buen sonido, ya tenemos todo lo necesario para el disfrute.
Repasó buena parte de su discografía, y aunque los más aplaudidos fueron los temas más antiguos, también brillaron sus cortes más modernos, intercalados por solos de todos los integrantes, Mana a la batería con toques ochenteros del coche fantástico, Nalle -que sustutiye a Hella debido a una emergencia familiar- al teclado, Kone al bajo también con intro ochentera de Miami Vice, o Hiisi brillando a las seis cuerdas.
«The Riff» dio paso a «Girl in a suitcase» -donde su utilizó otro elemento del atrezzo que hasta el momento había contado con un cañón de humo, un hacha que escupía sangre, una motosierra- , «Syntax Error» con un juego de luces muy apropiado, «Call on the Wedding» o «Retropolis».
«Hellizabeth» sonó potente y divertida, con protagonismo del teclado, y el final fue un subidón constante con «Sandman», «Devil» -con Mr Lordi expandiendo sus alas de diablo-, «Monsterman» y el indispensable «Hard Rock Allelujah» como guinda final.
Banda infravalorada. Ghost con mucho menos y con las mimas armas, ha conseguido mucho más, por ejemplo.
Abrieron la noche los alemanes Blood White, una banda que también maquillada, explotó con precisión su mezcla de metal moderno, rock y hardcore y mucha potencia visual.
Por que Blood White también explotan sus disfraces donde predomina el blanco, sus lentillas y su maquillaje, aportando un toque visual que complementa una música competente y con gancho.
Sonaron bien, muy contemporáneos, y es que esa mezcla suena muy bien y sirve para gustar a un público muy diverso, con temas como «Don’t Blame Me», «Unhoy Water», «Fear», «Memories», «Befor I Die», «Run Or Die», «Bloodfield», «All I Said Was A Lie» o «Guns And FEar».
La banda presta especial atención al aspecto visual de su espectáculo, y lo cierto es que resulta efectivo, y encaja con esa música que tiene momentos de verdadero brillo.
Interesantes. Aquí hay madera.
Juan José Díez