LORD OF THE LOST + Scarlet Dorn + Nachtblut
Sala Salamandra, Barcelona
5 de noviembre de 2022
Organiza: Madness Live
Un día más nos venimos a la sala Salamandra a disfrutar de este espacio.
Puntuales como siempre a las 19h se abrían las puertas y pasaba la cola, que no había demasiada pero ya se juntaban unas cincuenta personas.
Sin darme cuenta habían pasado los primeros veinte minutos y la música ambiente junto con las luces de la sala se aflojaban y salía al escenario Scarlet Dorn. Van por faena y quieren aprovechar su tiempo hasta el último segundo, así que nada más poner los pies sobre el escenario empieza a sonar su primera canción con la que abrirán la noche Proud and Strong.
Cuando por fin tengo un segundo de asimilar lo que hay sobre el escenario, me doy cuenta que el batería y el teclista me suenan, y es que son los mismos músicos de Lord of the Lost.
Queen of Broken Dreams es el último disco de la banda alemana de gothic rock con y con el parche en la batería con el diseño de este, teníamos claro que venían a presentarlo.
Falling, Queen of the Broken Dreams, Born to Suffer y Unstill life fueron las canciones que seleccionaron para tocarlas ante su publico catalán.
Treinta minutos exactos que no dejaron que se pasaran en vano hicieron de su actuación un buen inicio de la noche, que el público ya cantaba y disfrutaba de la actuación y se notaba el calor del bullicio humano, símbolo de que los asistentes no estaban quietos sino que ya bailaban y se movían al son de la música de Scarlet Dorn.
Enseguida pasaba de nuevo el tiempo de espera entre una banda y otra cuando nuevamente la sala se preparaba para la salida de la segunda banda de la noche.
Los alemanes Nachtblut con sus cuerpos pintados de negro y las caras blancas pisan fuerte para defender su gothic metal, que por momentos me recuerda a una mezcla entre Rammstein y los grititos de Dani Filth con su banda Cradle of Filth. Su cantante Athanasios Toutziaridis lleva una estética formidable aunque más semblante a la de las bandas de black metal.
Abren la noche con Multikulturell, canción que forma parte de su disco Apostasie. Amok pone la sala del revés y el público enloquece cantando.
Siendo este disco ya nombrado el anterior a su último trabajo, fue el que mas peso tuvo en la noche incluyendo Sheinfromm, Frauenausbeiner y Lied für die Götter.
La noche también tuvo momentos donde el género gótico asomaba más que el metal con su tema Wie Gott Sein o el rock como es el caso de la canción Frauenausbeiner.
Cerraban su concierto con Alles Nur Geklaut interactuando con el público y haciendo que toda la sala se pusiera a cantar su “Eeoo, eeeo”
Curioso que cuando me paseaba por el público, siendo géneros musicales tan distintos, pude reconocer caras de los asistentes al concierto de la noche anterior de Sonata Arctica, algo que dice mucho del público de Barcelona, volcado en la cultura musical y de conciertos que apoyan a las bandas que pasan por la ciudad.
Finalizando el concierto la banda a las 20:45h, se disponían de nuevo a realizar el último cambio de la noche.
Puntuales como los demás a las 21h salen al escenario los integrantes de la banda más esperada de la noche.
Lord of the Lost abren su concierto con Dry the Rain así que ya sueltan una buena bomba musical para dar inicio a la noche.
La sala comienza a perder el espacio entre persona y persona y la gente está mas apretada que nunca. Una Salamandra llena hasta la boca luce orgullosa ante los alemanes.
La juventud de la banda y el reconocimiento en una buena época en la que brillaba el estilo gótico en España hace que la media del público asistente sea entre los 30 y 40 años de edad, pero esto demuestra que el metal gótico y el ambiente aún no está muerto.
Loreley nos pone los pelos de punta y nos hace sentir el dolor de la protagonista y su sufrimiento a través de la voz de Chris.
Entre el público no paran de haber gritos de las fans femeninas desesperadas que se atrincheraban en la primera fila y que entre canción y canción consiguen que los integrantes de la banda apenas puedan eludirlas desde el escenario y se les escapa alguna risa, alguna mirada o algún gesto hacia estas.
Su disco Judas y su esperada presentación llegan en un bloque donde van sonando una tras otra sus canciones; Priest, For they Know Not What They Do, Your Star has Led you Astray y Born with a Broken Heart.
Su anterior álbum Thornstar también estuvo presente en el repertorio de la noche pudiendo escuchar In Our Hands, Voodoo Doll, y Forever More.
En el escenario reinaba la actividad entre los integrantes, sobre todo por parte de su cantante Chris, que iba de un lado a otro, se subía a las plataformas que habían por escenografía e incluso ponía su pierna en la de su guitarra Pi Stoffers, pero en ocasiones inevitablemente la mirada se te iba hacia su batería Niklas que jugaba con Gared su teclista cada vez que se ponía a los tambores y los veías lanzándose baquetas el uno al otro entre risas.
Cerca de la hora y media de concierto y tras tocar Blood for Blood la banda se retiraba para coger aire y dar énfasis a sus últimas canciones de la noche.
En la vuelta de esta mini pausa alguien del público (masculino) que llevaba rato gritando lo mucho que amaba a Chris hizo despertar por fin su curiosidad y ponerse a responderle y bromear, cosa que hizo a toda la sala divertirse.
Forevermore, Credo y Drag me to Hell, con Chris lanzando su camiseta sudada al público y apareciendo con sus pezones cubiertos con unas X’s y todos los demás descamisados también, dieron el punto final a una noche donde pudimos disfrutar de varios estilos musicales pero todos unidos de la mano, incluso con integrantes compartidos y en la que el público de Barcelona salió con todas sus expectativas cumplidas. Un sonido impecable, unas bandas de lujo y un ambiente inmejorable. En definitiva, una gran noche más para el recuerdo.
Crónica y fotos: Ruth Gomez