SOEN + GHOST IRIS + WHEEL
MADRID – 29 MARZO 2019
SALA CARACOL
Viendo el llenazo de la Sala Caracol, el tirón de Soen está fuera de toda duda. Es cierto que no es una de las salas más grandes de la capital, pero del mismo modo, el estilo y música de Soen tampoco está dedicado a las grandes masas, así que se puede considerar que su actuación fue todo un éxito.
Abrieron la noche Wheel, de los que desgraciadamente sólo pude ver los 3 temas finales, cortes intensos, de calidad y que estuvieron caracterizados por el buen sonido, y con un estilo coherente al de los cabezas de cartel.
Lo del estilo es algo que ya no se puede repetir con Ghost Iris, podríamos decir que su concierto tuvo mucha más caña e intensidad, pero a veces la potencia sin control no sirve de nada. Peor sonido, y un cantante que fallaba bastante en las notas limpias. Personalmente me decepcionaron y se me hicieron bastante aburridos.
En cuanto a Soen, lo único que se puede decir es que encandilaron a la audiencia, el dulce arrullo de su música va tejiendo una tela de araña que siempre te atrapa, ellos miman la música, cuidan al detalle las composiciones y en directo las ejecutan con gran maestría…. de ahí que acaben cautivando al público.
Con el simple inicio de «Covenant» pudimos sentir el sonido cristalino del que íbamos a disfrutar toda la noche, aunque si nos ponemos super quisquillosos, un poco más de volumen en la voz nos habría permitido disfrutar aún más de la maravillosa destreza de la garganta de Joel Ekelöf , un cantante que transmite un sentimentalismo superlativo. Tras «Opal», y «Rival» llegó «Tabula Rasa» uno de los cortes más Tool de la banda, que fue recibido con una atronadora ovación.
Cuando se habla de Martin López, siempre se comenta su pasado en Opeth, pero creo que lo que está haciendo con Soen es superior, y gracias al ya mencionado gran sonido, pudimos disfrutar de esos ritmos tan sincopados y únicos. El resto de la banda, obviamente, también estuvo a gran altura, donde el mayor protagonismo visual pudo tomarlo su guitarra líder Cody, aunque la batuta en cuanto a sonido la llevaban bajo y batería, por no hablar de los múltiples aportes de Lars Åhlund , cambiando entre teclado, guitarra y alguna que otra percusión.
«Lascivius», «Jinn», «Ludicity» y «Oponent» fueron las siguientes elegidas, donde hubo momentos de esos que podemos catalogar de mágicos, cuando llegaban las estrofas que básicamente cantaba Jöel sin instrumentos, pudiendo sentir toda la intensidad y sentimiento que transmite con su voz… hasta el público pedía silencio para disfrutarla al 100%.
Uno de los mejores temas de su último disco «Lotus«, «Martyrs» (donde de nuevo el interludio casi sin instrumentos fue pura magia) encaminó el concierto a su final, siendo «Slithering» el encargado de poner el punto y seguido, para finalmente enlazar con los bises en forma de «Savia» y un hiper vitaminado «Sectarian» que sonó más potente que en el disco, y que supuso un gran contraste con el tema final elegido, un pausado y nostálgico «Lotus».
Aquí hay división de opiniones, para unos erraron al elegir un tema tan lento para cerrar, hubieran preferido cerrar con la energía del tema previo, pero personalmente creo que un tema así define mucho mejor la esencia de Soen, así que nada que objetar.
No había dudas, pero por si acaso, lo repetimos, conciertazo.
Juan José Díez