VINNIE MOORE
4 DE DICIEMBRE DE 2018
SALA LA NAU
Mucha expectación y mucha gente para ver al actual guitarrista de UFO en su versión de guitar hero. Vinnie Moore es pura clase, velocidad y feeling. Ha estado con Alice Cooper (Hey Stoopid), en los inicios de Vicious Rumors (1985) o sustituyendo a uno de los guitarristas más fundamentales del heavy metal como es Michael Schenker. Aparte posee una prolífica carrera en solitario con ocho discos en su haber. A diferencia de muchos súper-guitarristas actuales Vinnie da espacio a su banda de acompañamiento y permite que sus compañeros luzcan calidad y técnica. El miedo a que le hagan sombra es inexistente.
Perseida cumple con creces su papel de teloneros
La sala la Nau barcelonesa ya registraba una gran entrada desde la actuación de Perseida. Gran papel del cuarteto barcelonés que presentaban su EP Sciamachy. Su rock alternativo convenció y arrancó aplausos, pues el combo está trabajado y se nota. Carlos hizo de maestro de ceremonias y consiguieron un impecable fin de concierto con “Working Crush Hero”. Los temas enganchan y técnicamente el grupo cumple bien. Posiblemente la final “Chaos Zone” fue lo mejor de un concierto en el que pudimos ver claro que el underground de Barcelona está a un nivel más que alto.
Vinnie Moore, sonrisas, clase y velocidad
Con una intro pregrabada entró el gran Vinnie Moore junto a una banda de italianos de altísimo nivel técnico. Cuando el grupo que acompaña al héroe disfruta y cumple, el show gana muchísimos más enteros. Ya en “Daydream”Vinnie empezó a correr por el mástil a velocidad endiablada y vestido de riguroso negro. Destacó un bajista súper-concentrado en su quehacer, con diez cuerdas (¡!!), un guitarrista de apoyo para la base y un baterista que dejó patente que es todo un prodigio técnico y el cómplice de Vinnie. “With the Flow” arrancó con ese deje funky, pero en general pudimos ver claramente que Jimi Hendrix es la gran inspiración del americano.
Pronto hubo parlamentos por parte del hacha dejando claro que su amor por la ciudad condal viene de lejos. Tiene incluso un tema dedicado a Barcelona. “¿Estamos en Barcelona o debería decir que estamos en la Barceloneta? Genial estar de vuelta por aquí, solo que esta vez trabajando…” confesó. En “The Maze” ya hubo solos por parte de todos los instrumentos que desembocaron en un fragmento del riff del “Smoke on the Water”. Sí, Blackmore es el otro Dios que ha influenciado a Vinnie, y en este tema queda bien reflejado. A pesar de ser todo el material instrumental el concierto fue dinámico y distendido. Dudo que nadie se aburriera.
La clave de un guitar hero es lograr la complicidad de tu banda de apoyo y del público.
Antes de la balada “Rain” un sudado Moore decía que le quemaban los ojos del sudor y le pedía la camiseta a su compañero Marco (bajista) para secarse. Tras “Rain” presentó a la banda y no sería la única vez que lo haría al largo de la noche. “Check It Out!” es pura inspiración Hendrexiana e “In Control” es el primer tema de su primer disco. Un placer escuchar esta primeriza pieza con todo el rollito guitar hero de esa época. Exceso total de florituras, pero con mucha clase, finalizando con una pregunta a la audiencia: “¿Habéis hecho ya las compras de navidad?”. Incluso se atrevió a improvisar un fragmento de “Spanish Castle Magic” del divo de Seattle para terminar declarándole todo su amor.
Tras “Time Traveler” nos confesó que estaba inspirada en el “Little Wing” de Hendrix. Moore empezó un parlamento, pero lo dio por terminado con una sonrisa y un: “Ves a una chica guapa y te pierdes sobre lo que ibas a decir”. El grupo mostró músculo y técnica, pero sobre todo Roberto en la batería, que dispuso de tiempo suficiente para hacer diabluras técnicas. “Ridin’ High” empezó con ese riff de inicio tan deudor de AC/DC y fue uno de los momentos cumbres de la noche. El astro de las seis cuerdas nos recordó que era el último show de la gira hispana. “19 conciertos en 21 días y desgraciadamente ya se termina”, dijo. Para nada se les vio cansados y sí encantados de estar allí.
Gran concierto con un mucho de Hedrix y un poco de Blackmore
Moore decidió charlar con el público y empezó a mirar camisetas de los espectadores. “Con Gus G. Me he estado mandando mensajes esta misma noche. Kiss y Maiden me encantan y UFO… ¡ni idea de quienes son! Pero el guitarrista es bueno”, bromeaba. “Midnight Rain” y “Morning Star” terminaron con la primera parte del show dejando a los asistentes extasiados. Gran parte de la culpa la tiene la sala. La Nau suena de maravilla, pero el tema luces es bastante mejorable. En los bises sorprendieron con una jam que apenas estaba ensayada. “La hemos tocado tres veces ya en directo y la llamamos Fun Jam Song”. Pinta que terminará como tema nuevo.
Emilio, el guitarra rítmico, puso la base para que Moore nos hiciera tocar el cielo con “While My Guitar Gently Weeps” de los Beatles. Brutal demostración técnica con un Vinnie apoteósico. La verdad es que el tema da mucho de si para desmelenarse. Y es que las canciones de George Harrison son para muchos las mejores de los Beatles. El adiós lo puso la cortita pero intensa “Meltdown” y un “feliz navidad” para todos. Hora y cuarenta de disfrute con un guitarrista capaz de demostrar lo que vale con canciones espectaculares y entretenidas. Y lo más importante, capaz de lograr la complicidad de banda de apoyo y del público. Le vemos en unos meses Mr. Moore… con UFO.
TEXTO: JORDI TÀRREGA
FOTOS: ALFREDO RODRÍGUEZ ESPADA