SARATOGA – Aeternus
Maldito Records
7,5/10
Saratoga es una banda que pese a las adversidades, siempre ha salido adelante. Desde que su nuevo cantante, Tete Novoa, se asentara, la banda ha proliferado y en este tiempo han sacado trabajos de gran calidad y siguen estando en primera línea del panorama español. No es de extrañar que cuando se estrena un nuevo disco suyo la expectación ante sus nuevos trabajos sea grande.
Dos años y medio tras su último trabajo «Morir en el bien, morir en el mal» han tenido que pasar. Antes de que se publicara propiamente dicho el disco «Aeternus», tuvimos la oportunidad de escuchar algún single que se estrenó días antes. Este nuevo disco no supone una gran diferencia con respecto a último de trabajo de Saratoga por ejemplo, pero pone de manifiesto el estilo único que define a Saratoga y por el que todos sus componentes siguen abogando a día de hoy. No hay más que ver la sólida formación con la que cuentan desde la incorporación de Tete Novoa como cantante. Con Niko del Hierro al bajo, Jero Ramiro a la guitarra rítmica y solista y Dani Pérez a la batería.
El tema elegido para abrir el disco, «El Olvidado de Dios«, fue el primer single en darse a conocer y del que se publicó el videoclip a la vez. Un corte con melodía rápida y un estribillo pegadizo que hace de este un tema digno de ser elegido como single.
Si bien es cierto que algunos temas me pasan más desapercibidos, por el simple hecho de que evocan a un estilo tan propio de Saratoga que no reparas en algunos detalles, hay algunos otros que están muy cuidados y que quizá llaman más la atención por la diferente línea musical en los primeros acordes o un estilo rápido al empezar que te capta «ipso facto», es el caso de las canciones como «Tres Ahorcados» o «Renegado«, en el que Tete se atreve con unos tonos más graves y con unas melodías no tan fácilmente «cantables» que le dan un toque especial.
He de destacar dos temas «Si Tú No Estás» y «Acuérdate de mí«, que podrían ser las baladas del disco sin duda, con una temática mucha más romántica, pero siempre con ese toque heavy, riffs y baterías rápidas, en el caso del primero, y más lentas en el caso del segundo, que hacen una conjunción única que le dan a estos cortes una aura especial.
La verdad que el disco al componerse de 10 temas se hace especialmente corto, y tras estas baladas que son más relajadas o con un sentido más latente, restan «Culpo a Dios«, «Cien Mil Veces No» y «Siempre hacia el sol«. En los que se retoma los riffs eléctricos, la batería y la voz a un ritmo presto y así vuelven a tomar el protagonismo. Acabando con el último tema, con una clara declaración de intenciones con la recurrente inspiración en la decepción amorosa.
En conclusión, nuevo disco de Saratoga, con un sonido renovado y moderno, pero en los que muchos temas nos han pasado desaparecibidos y nos falta algo más para que sea un gran disco de Saratoga. Así y todo hay temas que destacan y que dejan más que claro el por qué Saratoga sigue siendo un referente a día de hoy tras tantos años con un estilo tan único y singular.