NERVOSA + REAPTER + DELDRAC
BARCELONA – 14 DE AGOSTO 2017
RAZZMATAZZ 3
La noche del pasado lunes 14 de agosto se presentaba como una fecha señalada para los amantes del thrash metal de tierras barcelonesas. Y, en definitiva, el evento no defraudó en absoluto. Tres bandas: una local, unos no muy conocidos italianos y un trío brasileño formado exclusivamente por mujeres (no muy habitual en este género) se encargaron de arrasar la pequeña Razzmatazz 3, la cual presentó una notable entrada.
Los primeros en subirse al escenario fueron los locales Deldrac, una banda que combina los riffs típicos del heavy metal clásico con la dureza y la contundencia del thrash. El combinado cuajó una actuación correcta de la mano de la veteranía de su guitarrista Quimi Montañés (ex componente de la antigua banda barcelonesa Legion) y del carisma del cantante Eric Moya. Repasaron bastantes temas de su único álbum hasta el momento, “One day more, one day less”, entre otras composiciones. Entre ellas destacaron Lethal liberty, The real dark power y Thought police. Su actuación se vio finalmente cortada debido a que ya sobrepasaban el límite de tiempo.
Minutos después hacían acto de presencia sobre el escenario los italianos Reapter, una banda que presumiblemente no creaba expectativas demasiado altas entre muchos de los asistentes, pero que acabó convenciendo firmemente a más de uno, incluido un servidor. Reapter es una trabajada banda que lleva 12 años de existencia y 2 álbumes a sus espaldas, y todo este recorrido hace que realmente suene altamente consolidada. Un thrash metal altamente técnico, incluso con ciertas pinceladas de progresivo en algunos momentos, y ejecutado con convicción. No destaco a ningún miembro del grupo, pues todos ellos estuvieron a un nivel realmente digno.
Y, finalmente, llegó el turno de Nervosa, la banda por la que la mayoría del mundo asistía. Tal y como comentaron durante el concierto, las brasileñas sufrieron la noche anterior un robo en el cual perdieron parte de sus instrumentos y equipo. Salvaron el concierto reponiendo a toda prisa el material robado, tal vez por ello debieron hacer las pruebas de sonido justo en el momento anterior a la actuación. Las componentes son especialmente meticulosas con su sonido, lo cuidan todo al detalle y gracias a ello mereció la pena esperar unos minutos a que lo perfeccionaran pacientemente.
Tan pronto como los primeros acordes empezaron a sonar, un moshpit apareció en el centro de la sala casi al instante. El público tenía muchas ganas de verlas y se notaba. No era para menos: Nervosa es una auténtica apisonadora. Un thrash metal sin concesiones, pero interpretado cuidadosamente y sin dejar casi detalles sin pulir. Buena muestra de ello son las espeluznantes expresiones faciales de la cantante y bajista Fernanda Lira, las cuales la hacían parecer un auténtico demonio sobre el escenario. A destacar también la enorme contundencia con la que sonaba la guitarra de Prika Amaral, me atrevería a decir que he llegado a ver bandas con dos o más guitarristas y que no lograban un sonido tan pleno como el del trío brasileño. No fue menos también la actuación de la joven nueva incorporación a la banda, la batería Luana Dametto, la cual demostró un enorme nivel técnico y se atrevió incluso con un solo.
El setlist se plagó de canciones rápidas y violentas que, combinadas con el carisma de la banda y en especial de Fernanda, fueron un cóctel explosivo. Destacaron, entre muchas otras, Intolerance means war, Masked betrayer, Death, Hostages y una final Into moshpit en la que la banda y el público dieron el resto.
Después del concierto, las miembros de Nervosa se dejaron ver entre el público amablemente para hacerse fotos y autógrafos. Fernanda Lira se presentó visiblemente emocionada por el cariño recibido después de las obvias dificultades para realizar el concierto. En definitiva, un concierto que quedará seguramente en la memoria de muchos de los asistentes. Sin duda, Nervosa tienen un enorme futuro en el mundo del thrash metal si nada se tuerce. Recuerden su nombre.