1984 – En busca de un futuro

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1984 – EN BUSCA DE UN FUTURO

ROCK CD RECORS

7 / 10

Si os llamáis 1984, y no hacéis un disco conceptual sobre la lucha contra el doblepensar de un tío vestido con un mono azul, me vais a tener un poco a las malas de buenas a primeras. Decepción de las expectativas, que le llaman. Macho, haz una canción que se llame “Habitación 101” por lo menos, que lo tienes a huevo. Pero bueno, os lo perdono. Más que nada porque el disco no está mal.

“En busca de un futuro” es el segundo trabajo de esta banda que comparte nombre con el magnum opus de George Orwell. Un rock pesado bastante uniforme durante todo el disco, fácil de escuchar y con letras de protesta social no excesivamente directa, valiéndose de cierto lirismo y retórica metafórica en lugar de ir al más típico “banqueroshijosdeputa”.

Las guitarras tienen una importancia bastante alta para ser un rock más social. Normalmente en estos casos casi todo el peso de la canción suele recaer sobre el vocalista, pero aquí no les importa dejar paso a solos generosos y punteos interesantes. Los riffs son pesados y resultones, con algunos virtuosismos puntales en los que se explayan y que son muy disfrutables. El bajo se escucha muy bien, y tampoco se queda atrás respecto a las guitarras.

Las primeras canciones siguen una línea de rock duro muy similar, siendo “Siglos de humo”, la primera canción del trabajo, la más potente y enérgica de todas ellas. Inicio  muy bueno del disco,  quizá se le puede achacar un estribillo un poco machacón (rimar “siglos de humo” con “son siglos de humo” iguaaal queda un poco cojo) pero ey, esas son las cosas que luego se dejan cantar bien.

Destacada “De la razón y la locura” por ser la única con un inicio más tranquilito, aunque según avanza se descubre como la del sonido más garajero de esas primeras canciones. Y es que como ya hemos comentado, los temas no destacan precisamente por intentar hacer algo diferente. Suenan a cosas a las que ya estamos acostumbrados, y quizá se les pueda echar en cara eso. Por suerte, el trabajo tiene un giro interesante con la inclusión de un saxo, en la canción antes mencionada, que sorprende por lo bien que se ajusta a la música. No es la combinación más común, así que bravo por ellos. Que no duden en buscar la colaboración de Jorge “Chino” en siguientes trabajos.  Este instrumento le da a las canciones en la que aparece mucha más personalidad e identidad. Bien por la elección de incluirlo.

Decir cabe que la voz tiene un timbre un poco nasal, uno de esos tonos que hay gente a la que no le acabará de gustar. Es una de esas voces que te tienes que acostumbrar. Por eso, me encontré disfrutando más del vocalista en las sucesivas vueltas que le di al disco. También comentar que la acentuación de los versos hay veces que queda un poco extraña. Puedo llegar a entender la elección, pero vaya, en ocasiones suena forzado, el verso no es todo lo natural que debería ser.

Como apunte, curioso el deje “sh” a lá cierto político gallego aficionado a los puros que se le nota al vocalista de la canción “alas cortadas”. Si os preguntan, siempre podéis decir que lo hacéis aposta y que las alas son las de cierta gaviota…

En conclusión, para mí, lo que vende este disco es sin duda las guitarras. Este es un disco, como diría mi abuela, “cumplidor”. Técnicamente muy correcto,  pero salvo ciertos momentos más inspirados, el resto, aunque no es para nada malo, no destaca especialmente.

Àlvaro Castells

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